Archivo mensual: abril 2010

‘Lifeline Express’, el tren que devuelve la vista a más de 100.000 chinos

Todos los colores del arco iris. Como si de una metáfora se tratara, los viajeros de este tren pasan del pozo más negro al mundo multicolor. Un milagro con ruedas que avanza poco a poco y se detiene lo justo para provocarr este prodigio humano. Son ya doce años, pero el tren del arco iris, el ‘Lifeline Express’, sigue llevando su valiosa carga a bordo para llevar la luz donde solo hay oscuridad. Los mejores oftalmólogos de las grandes urbes se trasladan a las zonas más pobres de China con un noble cometido, devolver la vista a miles de pacientes de cataratas que no tienen dinero para costearse esa operación. Más de 100.000 personas han recobrado su visión gracias a la labor de esta iniciativa, que nació como un «regalo» de Hong Kong al resto de China y ayuda a paliar un problema que afecta a más de cinco millones de chinos, con 500.000 nuevos afectados cada año.

La iniciativa nació de manos de Nellie Fong, política y empresaria hongkonesa que preside la fundación, inspirada en los trenes que con ese mismo nombre se crearon en la India en 1991 para brindar servicios médicos a las poblaciones pobres del inmenso país asitático. Fong viajó a la India para conocer el trabajo de los trenes-hospital indios, también conocidos como ‘Jeevan Reja Express’, y decidió crear una iniciativa similar en China, aunque dedicada solamente a los pacientes de cataratas. Esta afección de la vista es especialmente frecuente en zonas del país con fuerte exposición solar, como la meseta tibetana.

Cuatro trenes ‘Lifeline Express’ recorren en este momento China dedicados a este altruista servicio. Cada tren tiene un coche-quirófano, otro dedicado a consultas y exámenes médicos, un tercero para alojar a los pacientes tras la operación (deben descansar allí una noche) y otro para el equipo médico. No disponen de locomotora, por lo que deben viajar «acoplados» a los convoyes de la red china de ferrocarriles, y a veces tienen que cambiar varias veces antes de llegar a su destino.

Una vez arribado, el tren arco iris es colocado en una vía auxiliar para no afectar el tráfico ferroviario, y comienzan a llegar a él los pacientes de las zonas rurales aledañas, quienes han sido avisados por el hospital local de la llegada del ferrocarril que va a devolverles la vista. El precio de esta intervención en un hospital (en China la sanidad es de pago) suele costar unos 5.000 yuanes (730 dólares, 550 euros), el equivalente al ingreso de varios meses para muchos campesinos. Según Juliana Ma, «se optó por este tipo de atención médica porque es una sencilla operación quirúrgica, rápida, y que puede cambiar la vida del paciente». Aunque las cataratas suelen ser un achaque de las personas ancianas, el tren atiende a personas de todas las edades.

Los fondos que sostienen el tren provienen de empresas chinas y hongkonesas, tanto estatales como privadas, y también alguna foránea, por lo que la fundación anima a la gente de fuera de China a que colabore en costear un proyecto que emplea 2,7 millones de yuanes (395.000 dólares) en cada estación por la que pasa.

El primer tren chino de ‘Lifeline Express’ circuló en 1997 con treinta personas a bordo, pero con el aumento de la experiencia y la eficiencia técnica, ahora cada vehículo sólo necesita una tripulación de siete personas: Dos oftalmólogos, otras tantas enfermeras, un técnico, un administrador que coordina las operaciones con los hospitales locales, y un cocinero.

Cada tren visita tres zonas del país al año y en cada parada trabaja tres meses, donde se opera a más de 3.000 personas. Las leyes chinas prohíben que un médico extranjero lleve a cabo operaciones en el territorio, por lo que los médicos foráneos no pueden participar directamente, pero la fundación anima a aquellos interesados a viajar a China para impartir cursos de formación oftalmológica para ayudar en el proyecto. También se procura formar a los médicos de esta zonas adonde llega el tren, de cara a contar con nuevos hospitales, que se ocune directamente de la atención de este tipo de dolencias; son los ‘Lifeline Express’ sin ruedas.

Sindicato británico ferroviario repetirá la consulta sobre la huelga tras un revés judicial

El sindicato británico del Transporte repetirá un referéndum de huelga entre sus afiliados después de que el primero que realizó fuera considerado «ilegal» por un tribunal londinense que desautorizó el paro laboral. El secretario general del sindicato de Transportes, Marítimo y Ferroviario (RMT), Bob Crow, afirmó que la decisión judicial, que respondía a un recurso de la empresa Network Rail -gestora de las infraestructuras de ferrocarril en el Reino Unido- es «un ataque contra todo el movimiento sindical».

Un juez del Tribunal Superior de Londres desautorizó el jueves la huelga nacional de cuatro días convocada por los empleados de la red de trenes al concluir que había habido defectos de procedimiento y coincidir con la empresa en que ocasionaría «un inmenso daño a la economía». El paro, anunciado el 25 de marzo en protesta por la supresión de 1.500 empleos y el incremento de los trabajos de mantenimiento en noches y fines de semana, debía empezar el próximo 6 de abril.

Aunque Network Rail sólo recurrió el referéndum hecho entre los empleados que operan las señalizaciones -sin los cuáles los trenes no pueden funcionar- y no el de los de mantenimiento y, en general, asalariados, las asociaciones que representan a éstos últimos han decidido repetir sus consultas en solidaridad con sus colegas.

Los representantes sindicales de los operarios de señales justifican los errores de procedimiento porque sólo reciben a última hora la información sobre cambios en la estructura de la plantilla -como ascensos, muertes o jubilaciones- que necesitan para organizar la consulta previa a la convocatoria de huelga.

La oleada de huelgas planteadas en el Reino Unido se ha convertido en un arma política entre los partidos de cara a las próximas elecciones generales -previstas para el 6 de mayo-, y tienden a apoyar el argumento esgrimido por las empresas -como sucedió también en el caso de la disputa en la aerolínea British Airways- de que los paros perjudican gravemente la economía.

Francia quiere una «autopista ferroviaria» Benelux-París-España

La «autopista ferroviaria» será vital para el trasporte de mercancías por ferrocarril. El secretario de Estado francés de Transportes, Dominique Bussereau, señaló que con la futura línea de tren de alta velocidad (TGV) entre París y Burdeos se pondrá en marcha una «autopista ferroviaria» para el transporte de mercancías entre el Benelux y España pasando por la región Ile-de-France. En una entrevista publicada por «La Tribune», Bussereau destacó que con la nueva línea TGV de la fachada atlántica, para la que se ha atribuido a Vinci la construcción y explotación del tramo Tours-Burdeos, habrá más frecuencias para los convoyes de mercancías por la vía convencional.

«Utilizaremos esa oportunidad para desarrollar el transporte de mercancías y poner en marcha una autopista ferroviaria atlántica entre España, Ile-de-France y la frontera del Benelux», indicó.

En la actualidad ya existe en Francia una «autopista ferroviaria» por la que circulan trenes a los que se cargan las cajas de camiones para cubrir el trayecto entre Perpiñán y Luxemburgo, y hay planes para prolongar ese eje una vez que se abra el tramo internacional de TGV entre Perpiñán y Figueras, en España.

El secretario de Estado aseguró que «todos los cálculos socioeconómicos muestran» que los 7.200 millones de euros que costará la construcción de los 302 kilómetros de línea TGV entre Tours y Burdeos son «rentables».

Además, recordó que ese tramo será el tronco común de la prolongación de las infraestructuras de TGV por el sur hacia España, por el suroeste hacia Toulouse y por el oeste hacia Limoges.

Entre las ventajas de ese tramo que Vinci va a explotar hasta 2060 mediante el cobro de peajes por los trenes que lo utilicen, Bussereau indicó que los habitantes de Burdeos y de las regiones que atraviese la nueva línea tendrán un acceso fácil a la estación del aeropuerto parisino Charles de Gaulle

Un juez considera ilegal el paro de los ferrocarriles ingleses

Un juez del Alto Tribunal de Londres desautorizó hoy la huelga nacional de cuatro días convocada por los empleados de la red de ferrocarril del Reino Unido por considerarla «ilegal» y tras argumentar que ocasionaría «un inmenso daño a la economía». Estos trabajadores anunciaron el pasado 25 de marzo un paro laboral, cuyo comienzo estaba previsto para el próximo 6 de abril, en protesta por la eliminación de empleos anunciada por Network Rail (NR), la empresa pública que gestiona la infraestructura ferroviaria de este país. Un juez británico consideró hoy la medida de fuerza «ilegal» y argumentó que ocasionaría «un inmenso daño a la economía» de Reino Unido.

En respuesta al mandato judicial, el secretario general del sindicato de transportes RMT, Bob Crow, manifestó que la decisión constituía «un ataque a todo el movimiento sindical» y observó que «tergiversa las leyes antisindicales todavía más en favor de los empresarios». «Los trabajadores que luchan por una red ferrovial segura han visto cómo todo el peso de la ley se volvía en su contra», enfatizó. Pese a este contratiempo legal, Crow aseguró que la lucha de los sindicatos por lograr «prácticas laborales seguras» en los ferrocarriles británicos «continuará».

Por su parte, el secretario general de la confederación sindical británica Trade Union Congress (TUC), Brenden Barber, lamentó la «creciente facilidad» que tienen los empresarios para recurrir a los tribunales e «intervenir y anular» una votación democrática para ir a la huelga. Por contra, el ministro de Transporte británico, Andrew Adonis, afirmó que esta resolución del Alto Tribunal supondrá «un enorme alivio para todos aquellos que estén planeando viajar en tren la próxima semana». «Ahora es vital que las dos partes de este conflicto vuelvan a sentarse tan pronto como sea posible a negociar un acuerdo y les insto a que lo hagan», dijo el titular.

De haberse llevado a cabo, la huelga habría supuesto la mayor interrupción del servicio de ferrocarril del Reino Unido de los últimos 16 años. En esa convocatoria se iban a unir trabajadores de mantenimiento, supervisores y encargados de operar en las señales ferroviarias.

Estaba previsto que los paros, convocados por el sindicato de transportes RMT, duraran desde las 05.00 horas GMT del 6 de abril hasta las 22.59 horas GMT del día 9 como protesta contra los 1.500 despidos anunciados por Network Rail.

Representantes de RMT y NR se reunieron la pasada semana para tratar de llegar a un acuerdo acerca de los recortes laborales y de los planes de la empresa, que contemplan que sus trabajadores realicen más turnos de tarde y fines de semana.

El sindicato negociaba con la empresa para proteger la seguridad en el transporte ferroviario, la estabilidad laboral de los trabajadores y los acuerdos contractuales de los empleados de mantenimiento y señalización del servicio ferroviario británico

El tranvía de Vitoria, portada de la revista ‘Tramways & Urban Transit’

Internacionalización. Sin fronteras y completamente abierta al mundo. El tranvía de Vitoria protagoniza la portada del nuevo número de la revista británica de difusión internacional ‘Tramways & Urban Transit’, que califica «modelo» este medio de transporte para una ciudad pequeña. Según ha informado Eusko Tran, la revista analiza a lo largo de cuatro páginas el tranvía de Vitoria, sus paradas, tipos de billetes y precios, y considera que este sistema de transporte, avalado por el número anual de usuarios, tiene un «éxito sin precedentes». Inaugurado en diciembre de 2008, ha alcanzado el corazón de los vitorianos que veían con recelo la llegada del nuevo transporte.

El periodista especializado Tony Young destaca también la coordinación con el sistema de autobuses urbanos para que la oferta sea realmente completa y la utilización de las últimas tecnologías tanto para informar a los viajeros como para el propio mantenimiento del tranvía. Elogia su carácter respetuoso con el medio ambiente y su implantación «integrada» en Vitoria, y recomienda a ciudades inglesas como Southampton, Derby o Reading, de población similar a Vitoria, e incluso mayores, como Liverpool o Belfast, que tomen nota.

Tramways también ensalza el sistema informativo del tiempo de espera hasta el siguiente tranvía, el diseño interior, la accesibilidad y las pistas de hierba en las que se encuentran los raíles como parte de un tratamiento medioambiental de «alta calidad».

Esta publicación está considerada como ‘la biblia’ de este tipo de transportes y reconocida como una de las más prestigiosa a nivel mundial en la temática de tranvías. Pertenece a la Light Rail Transit Association, entidad decana del estudio y la divulgación de los desarrollos tranviarios modernos. A lo largo de sus 40 años de existencia, ha analizado sistemas de transporte urbano muy diversos, desde los de Toyama en Japón hasta el tren elevado de Bangkok o el conocido tranvía de San Francisco