Archivo mensual: mayo 2018

Rementeria pone condiciones al Metro a Galdakao

El diputado general de Bizkaia, Unai rementeria, afirma que le gustaría unir la red de Metro con Galdakao y su hospital y «hacerlo de forma eficiente, aprovechando las infraestructuras que hay en estos momentos». «Yo creo que podemos y debemos aplicar esta receta a otras necesidades, combinando la red ferroviaria que ya existe y en ningún caso doblar una infraestructura. Hay que aprovechar lo que tenemos», ha defendido durante el pleno de Juntas Generales celebrado en Gernika.

Rementeria se ha referido a la unión de Galdakao con el Metro en respuesta a una interpelación de Podemos, que le ha instado a aclarar las prioridades del Gobierno foral en materia de infraestructuras. Nuria Atienza (Podemos) lamenta que Rementeria presente a los medios, «sin consenso previo», los proyectos de ampliación de la Supersur de Bilbao y la construcción del túnel de Lamiako, unas obras que costarán 600 millones.

Rementeria asegura que ambos proyectos estaban «desde hace mucho tiempo» sobre la mesa de la Diputación foral y dice que permitirán resolver tres de los principales problemas de congestión de tráfico que existen en Bizkaia (en la A-8, la Avanzada y en Torrontegi). El diputado general manifiesta, en cualquier caso, que la movilidad de Bizkaia pasa en un futuro por «el tren, la bicicleta y la zapatilla», por lo que recuerda que el túnel de Lamiako deja la puerta abierta al paso de otros transportes como el ferrocarril o el tranvía.

«Al igual que hace tres años supimos decir que no a las grandes obras, porque no había dinero para sufragarlas, ahora sabemos decir que sí y asumimos la responsabilidad como Gobierno para decir que sí. Porque nos hemos asegurado que podemos pagarlo y porque es bueno para Bizkaia», recalca.

Atienza lamenta que, con el túnel de Lamiako, la Diputación foral opte por «la solución más cara», mientras que con la ampliación de la Supersur «repita el fiasco». De igual forma, se queja que, con estas obras, la ampliación del Metro a Rekalde «vuelva a la casilla de salida», por lo que duda de que este barrio pueda tener suburbano.

«Tenemos dinero para la Supersur, pero para el Metro no tenemos», censura la apoderado de Podemos, quien explica que su formación llevará hoy al pleno del Parlamento vasco una propuesta en favor del diseño de un calendario para la construcción del metro en Galdakao.

EH Bildu considera también «imprescindible» que cualquier línea de Metro que pase por Galdakao y el Hospital de Galdakao-Usansolo, por un lado, «debe tener una conexión directa con la línea general de Euskotren para que mejore la comunicación de las comarcas de Durangaldea y Busturialdea», y por el otro extremo, «debe estar conectada a la estación intermodal de Sarratu como nodo de transporte en la comarca de Hego Uribe». Según ha advertido, con la llegada del Metro «no se solucionan todos los problemas de movilidad de Galdakao ni de las comarcas afectadas», sino que «son necesarias otras medidas que complementen a dicha línea de Metro».

5 trenes más de Bombardier para Elizabeth line

Bombardier Transportation ha recibido un pedido de Transport for London (TfL) para el suministro de cinco trenes adicionales, Bombardier Aventra, para operar en la Elizabeth line de Londres. Esta ampliación de contrato, valorada en aproximadamente 84 millones de euros, aumenta el pedido total a 70 trenes. El contrato también incluye una ampliación del acuerdo de servicios ferroviarios existente para los nuevos trenes.

Los vehículos adicionales permitirán aumentar la capacidad de pasajeros para la sección central del nuevo servicio de la Elizabeth line, así como para la extensión de los servicios de la Terminal 5 de Reading y Heathrow, haciendo posible transportar hasta 1.500 pasajeros por tren.

Los trenes, que han sido diseñados con la mirada puesta en la eficiencia energética, están equipados con sistemas inteligentes de administración de energía. Además, los vehículos también incorporan sistemas de mantenimiento de última generación, como el sistema Bombardier Orbita de mantenimiento predictivo o el Sistema Automatizado de Inspección de Vehículos. El sistema Orbita permite a los equipos de mantenimiento diagnosticar e identificar posibles incidencias antes de que ocurran, aumentando notablemente la capacidad de respuesta ante las averías que puedan priducirse en pleno servicio. Los nuevos trenes se sumarán a los 585 vehículos que actualmente están en producción en la fábrica Derby y que se espera que entren en servicio a finales de 2019.

Subvencionada conjuntamente por el Department for Transport y Transport for London, la Elizabeth line es el proyecto de infraestructura de este tipo más grande de Europa y ahora se encuentra en sus fases finales. Cuando se complete, el nuevo ferrocarril de Londres transportará más de 200 millones de pasajeros por año y aumentará en un 10% la capacidad ferroviaria del centro de Londres.

«La apertura de la Elizabeth line redefinirá el transporte de Londres. Los trenes adicionales nos permitirán atender a todas las terminales en Heathrow y proporcionar una mayor frecuencia cuando la línea esté completamente abierta en diciembre de 2019», destaca Mark Wild, director general de TfL para London Underground y Elizabeth line. «La Elizabeth line está diseñada para reinventar el transporte en Londres con viajes más rápidos, fáciles y accesibles, y estamos orgullosos de formar parte de este proyecto”, señala el director general de Bombardier Transportation UK, Richard Hunter.

Esta infraestructura –conocida como Crossrail debido a que fue concebida originalmente como un ferrocarril que uniría los suburbios y el aeropuerto de Heathrow pasando por el centro de Londres al estilo del RER de Paris- permitirá que más de 200 millones de pasajeros viajen por los 41,84 kilómetros de nuevos túneles, que incrementarán la capacidad del sistema ferroviario londinense en un 10%. El proyecto Crossrail consiste en unir líneas ferroviarias existentes a través de un túnel ferroviario por la zona central de Londres con el propósito de reducir la congestión de líneas del Tube, en particular de las líneas Central -identificada con el color rojo y que se superpone con la mayor parte del nuevo trazado- y Piccadilly -de color azul y la única del Tube en llegar a Heathrow-.

A principios de 2016, se decidió que Crossrail sería incorporado a la red del London Underground con el color violeta y que recibiría el nombre Elizabeth Line en homenaje a la reina Isabel II. Así, se convierte en la segunda línea de la red en llevar el nombre de una monarca británica luego de la inauguración de la línea Victoria en 1969.

AFCHE celebra en Gijíon su tercera asamblea

Este último sábado de mayo ha tenido lugar la tercera asamblea de la Agrupación de los Ferrocarriles Históricos Españoles (AFCHE) con el objetivo de consolidar las normas para el funcionamiento de estos ferrocarriles y abogar por la creación de una ley para este sector, además de aprobar el ingreso de la fundación Ferrocaib de Mallorca.

Durante la reunión celebrada en el Museo del Ferrocarril de Asturias se ha avanzado en la consolidación de la Normativa Técnica de Seguridad que rigen estos ferrocarriles históricos y ciclo-dresinas, que los miembros de AFCHE se han impuesto a sí mismos como ‘autorregulación’, al encontrarse, en la actualidad, en un vacío legal. Estas normas, definen las disposiciones técnicas para asegurar la explotación de las redes de estos ferrocarriles, constituyendo el documento de referencia para la construcción y mantenimiento de sus instalaciones y vehículos, y también la base para el control de este tipo de explotaciones ferroviarias.

En la sesión se aprobó el ingreso en la AFCHE de Ferrocaib, la fundación formada por Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM), la Asociación de Amigos de Ferrocarril de las Islas Baleares (AAFIB) y diversas personas a título individual. Guillem Febrer, gerente de Ferrocaib, ha presentado esta organización y sus proyectos de creación de un museo ferroviario en los talleres de Son Carrió y de un ferrocarril histórico entre esta localidad mallorquina y Sant Llorenc.

También se decidió continuar con los trabajos para el impulso de una ley ‘marco’ que regule este tipo de ferrocarriles por parte del Poder Legislativo español, estatal o autonómico, según corresponda. En la actualidad ya se ha elaborado una Proposición No de Ley por parte de la Comisión de Fomento del Congreso de los Diputados que propicia la creación de esta legislación. Además, se han tratado en la asamblea otros temas como la aprobación de cuestiones de tesorería, la información del ingreso en la Federación Europea de Ferrocarriles Turísticos y Museos Ferroviarios (FEDECRAIL) o la renovación de directiva.

AFCHE nace en 2015 por la unión de varias entidades explotadoras o con proyectos de ferrocarriles históricos; museos ferroviarios existentes o propuestas para su creación, y empresas o personas que prestan apoyo a los anteriores con el objeto de desarrollar una Normativa Técnica de Seguridad, promover la creación de la legislación necesaria y la base jurídica para la correcta implantación de dichos reglamentos, y construir una estructura formativa de aplicación común. Para dar mayor solidez jurídica a estas Normativa Técnica de Seguridad, es necesaria promulgación de esta Ley ‘marco’ que regule los Ferrocarriles Históricos

Actualmente, están en proceso de adhesión a esta agrupación el Ecomuseo Minero de Samuño en Langreo en Asturias, Ecorail en la comarca barcelonesa del Cardener y el futuro Museo de Ferrocarril de Aranda de Duero en Burgos. Fuera de esta agrupación, existen contados ferrocarriles históricos como el del Parque Minero de Ríotinto en Huelva.

Renfe mantiene su monopolio en Cercanías

Renfe seguirá explotando en monopolio los trenes de Cercanías y Regionales convencionales, considerados como servicios públicos y los que mayor número de viajeros transportan, durante quince años más, a pesar de que el transporte de viajeros en tren se abrirá a la competencia en toda la UE a finales de 2020. Así lo establecerá el contrato-programa que la compañía ferroviaria pública firmará el próximo mes de junio con el Estado, el documento por el que la Administración le encomienda estos servicios ferroviarios que reciben una subvención pública de unos 1.000 millones de euros al año.

El contrato-programa se firmará para un periodo de diez años, prorrogable para otros cinco. De esta forma, en el caso de que dicha prórroga se acabe ejecutando, Renfe seguirá siendo la única operadora que preste el servicio de Cercanías y de Regionales hasta 2033. La operadora pública sólo tendrá así que empezar en 2020 a afrontar la competencia de operadores privados en el negocio del AVE y la Larga Distancia.

El Gobierno puede seguir manteniendo los servicios ferroviarios públicos en régimen de monopolio porque la normativa europea sobre liberalización establece para ellos un periodo de transición en el que pueden continuar en manos de los operadores «incumbentes o dominantes» de cada Estado, esto es, de los que los gestionan actualmente. En concreto, esta norma comunitaria permite a los Estados seguir encomendando estos servicios al operador público directamente y sin competencia hasta el año 2024. A partir de ese año, los países ya no pueden adjudicar directamente estos tráficos, pero sí podrá seguir con su explotación la empresa dominante que ya los tuviera encomendados en esa fecha.

Renfe firmará el nuevo contrato-programa con el Estado seis meses después de que en diciembre de 2017 el Gobierno aprobara el nuevo listado de trenes de Cercanías y Regionales considerados de servicio público, que por vez primera en muchos años supuso un aumento de estas circulaciones. Se trata de líneas que no son rentables económicamente, pero sí socialmente, dado que garantizan ciertas conexiones y la movilidad de los ciudadanos.

La firma tendrá lugar tras anunciarse importantes planes de inversión pública en Cercanías, tanto en las estaciones como los trenes. De hecho, está previsto que los vehículos de este tipo constituyan una parte importante del ‘macroplan’ de compra de trenes que ultima Renfe. Los trenes de Cercanías transportaron 423,65 millones de viajeros el pasado año, un 3,6% más, y los regionales otros 23,3 millones (+1,5%), frente a los 21,10 millones de pasajeros que viajaron en el AVE y los 11,7 millones de Larga Distancia.

Bombardier se suma a la puja por el ‘macrocontrato’

Bombardier se ha sumado a la puja por el ‘macrocontrato’ de mantenimiento de trenes que Renfe ha sacado a concurso, que supone realizar estos trabajos en un total de 420 vehículos de Cercanías y Avant durante cinco años por un importe total de 450 millones de euros. La multinacional canadiense, Talgo, CAF, Alstom y Siemens presentaron este viernes a la operadora sus solicitudes para participar en la puja, con la que ‘calientan motores’ de cara al «histórico» plan de compra de nuevos trenes que Renfe prevé lanzar próximamente.

La compañía ferroviaria analizará todas las solicitudes. Las empresas que cumplan con todos los requisitos serán invitadas a participar en el concurso público con el que prevé adjudicar estos trabajos el próximo mes de octubre, según indicaron en fuentes de la operadora. El contrato en liza abarca casi una tercera parte (el 30%) del parque de trenes de la compañía ferroviaria pública, que suma un total de 1.360 unidades. Renfe ha sacado a concurso el mantenimiento de veinte trenes de Alta Velocidad Media Distancia (Avant) por un importe de 74,5 millones de euros.

La compañía ha licitado la prestación de estos mismos trabajos en unos 391 trenes de Cercanías de los núcleos de Madrid y Barcelona, y en nueve trenes de vía estrecha de la extinta Feve por otros 329 millones. A su vez, en el caso de este último contrato, se ha estructurado en siete lotes distintos, de forma que los fabricantes interesados pueden presentar oferta por alguno de ellos o por todos.

Los lotes oscilan entre los 8,60 millones que supone el mantenimiento de la decena de trenes de vía estrecha hasta los 75,5 millones a los que asciende el del mantenimiento de 86 trenes de Cercanías de Barcelona.

En todos los casos, la compañía o compañías adjudicatarias de los trabajos deberán acometerlos junto con los talleres de Renfe mediante la constitución de una sociedad conjunta con la operadora ferroviaria pública que controlarán al 51%. En virtud de los pliegos de contratación, los adjudicatarios deberán cumplir con un «elevado grado de fiabilidad y disponibilidad de los trenes, especialmente en horas punta, y garantías de calidad y seguridad».

Renfe abre la contratación de estos trabajos de mantenimiento en tanto la industria ferroviaria ultima lanzar su anunciado plan de compra de nuevos trenes, que comprenderá todo tipo de vehículos, especialmente de Cercanías y Mercancías, pero también de Alta Velocidad.

El Estado asumirá la deuda de la SNCF

El Estado francés asumirá en dos fases 35.000 millones de euros de deuda de la compañía pública de trenes SNCF para sanearla de cara a la apertura de la competencia en el transporte ferroviario interior de viajeros. El anuncio lo hizo el primer ministro, Edouard Philippe, durante los encuentros que mantuvo, sucesivamente, con los sindicatos para discutir algunos puntos de su reforma del sector ferroviario e intentar poner fin a la huelga intermitente en la SNCF que se prolonga desde comienzos de abril, con 22 días de paros hasta ahora.

Según el esquema presentado por Philippe, el Estado haría propios 20.000 millones de euros de esa deuda en 2020, a los que se sumarían 10.000 millones adicionales en 2022. Hasta finales del pasado año, la Sociedad Nacional de Ferrocarriles tenía un agujero de 46.600 millones de euros por los que ha de pagar 1.500 millones de euros en intereses cada año. Al ritmo actual, ese agujero aumenta en unos 3.000 millones de euros cada año.

El principal sindicato de la empresa, la Confederación General del Trabajo (CGT), consideró a su salida del encuentro con el primer ministro que el Gobierno está «más abierto» pero reafirmó su voluntad para seguir adelante con la protesta. El secretario general de la CGT en la SNCF, Laurent Brun, aunque reconoció ante los medios que los 35.000 millones de euros constituyen una parte «significativa», se quejó de que el Ejecutivo no ha admitido que esa deuda es consecuencia de sus propias decisiones, en particular sobre la construcción de líneas de alta velocidad. Brun consideró que «la movilización es más que nunca necesaria» y que «es responsabilidad del Gobierno buscar una salida al conflicto«.

El porcentaje de huelguistas ha disminuido significativamente desde comienzos de abril, cuando era de casi el 34%, hasta algo menos del 15% el jueves, en la última jornada de protesta hasta ahora. El Gobierno espera que su anuncio de reducción de la deuda sirva para que la Unión Nacional de Sindicatos Autónomos (UNSA) y la Confederación Francesa de Trabajadores (CFDT) se desmarquen de los otros sindicatos en la continuidad de los paros.

En paralelo, la ley de reforma del sector ferroviario que está en el origen de la protesta, continúa su tramitación parlamentaria en el Senado. Los aspectos más polémicos de esa ley, sobre los que el Ejecutivo no está dispuesto a transigir, son el fin del particularmente ventajoso estatuto laboral de los trabajadores de la SNCF y la transformación de la empresa estatal en sociedad anónima.

Acuerdo para descarbonizar el transporte

Alstom, junto con otras empresas, ciudades y países, anuncia la creación de la Alianza para la Descarbonización del Transporte (ADT), una coalición que busca sumar fuerzas y acelerar la descarbonización del sector del transporte. El lanzamiento de esta plataforma ha tenido lugar durante el Foro Internacional del Transporte (International Transport Forum, ITF), que se celebra en Leipzig, Alemania, entre 23 y el 25 de mayo.

Las emisiones del transporte representan actualmente el 25% de todas las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con la generación de energía. La Alianza para la Descarbonización del Transporte busca, a través de esta coalición, impulsar la transformación del transporte mundial para reducir sus emisiones a cero en el año 2050. La Alianza promoverá el debate sobre la descarbonización a todos los niveles (global, nacional y local) con políticas públicas y corporativas. Se busca demostrar, a través de distintas iniciativas, que la descarbonización es técnicamente factible, económicamente atractiva y ofrece amplios beneficios sociales y ambientales.

«La descarbonización en el sector de la movilidad puede alcanzarse; todos los sistemas de transporte deben reinventarse y transformarse para responder a este desafío. Junto con nuestros socios en la Alianza para la Descarbonización del Transporte, esperamos estar a la vanguardia de esta transición «, destaca Henri Poupart-Lafarge, presidente y consejero Delegado de Alstom.

Entre las empresas fundadoras de la Alianza se encuentran, además de Alstom, CEiiA, EDP, ITAIPU, Binacional, Michelin y PTV. Los países miembros son Costa Rica, Finlandia, Francia, Luxemburgo, los Países Bajos y Portugal. Curitiba (Brasil). Rotterdam (Países Bajos), Lisboa (Portugal) y las municipalidades agrupadas en el “Frente Atlánntico” (Porto, Gaia y Matosinhos en Portugal) completan la lista de ciudades adheridas.

Desde hace años, el Grupo Alstom está comprometido con la lucha contra el cambio climático, mediante el desarrollo de innovaciones sostenibles, así como con la participación en diferentes eventos y alianzas. Para ayudar a impulsar la neutralidad del carbono en el transporte, Alstom ha definido su propia estrategia en tres áreas de actuación: situar las soluciones eléctricas y eficientes en el centro de su cartera de productos, facilitar la transición energética hacia soluciones de movilidad sostenibles, y descarbonizar sus operaciones y actividades.

Un ejemplo de innovación y liderazgo global de la compañía en este campo, es el lanzamiento del Coradia iLint, el primer tren del mundo propulsado por hidrógeno. Coradia iLint es un tren regional que ofrece una alternativa completamente libre de emisiones a los trenes diésel, para líneas ferroviarias no electrificadas. Alimentado por una pila de combustible en la que el hidrógeno se convierte en energía eléctrica, el Coradia iLint solo emite vapor y agua. Alstom ofrece el Coradia como parte de un sistema completo, que incluye, además de los trenes, su mantenimiento y la infraestructura necesaria para el suministro de hidrógeno. El tren entrará en servicio regular en la ruta Cuxhaven-Bremervörde en la región de Baja Sajonia, Alemania, durante 2018. Recientemente, el Coradia iLint ha recibido el Premio GreenTec 2018 en la categoría Mobility by Schaeffler.

Ferrovial gestionará los trenes de Gales

Ferrovial, en alianza con la francesa Keolis, se ha adjudicado el contrato de gestión del servicio ferroviario de Gales (Reino Unido) para un periodo de quince años y por un importe de 5.000 millones de libras (unos 5.700 millones de euros). El grupo que preside Rafael del Pino refuerza con este contrato el negocio de prestación de servicios ferroviarios con que cuenta en Reino Unido, primer mercado de la empresa por delante de España, si bien actualmente está reduciendo porcentualmente su peso el país ante las incertidumbres generadas por el ‘Bexit.

Siempre junto con Keolis, Ferrovial ya se encarga de gestionar el servicio del tranvía de Manchester, el mayor de Reino Unido, que se adjudicó a comienzos del pasado año, y desde mediados de 2014 explota el tren ligero del Este de Londres. Respecto al contrato de Gales, que aún no ha sido confirmado por las empresas ni por Transport for Wales, abarca, además de la gestión de los trenes, la del metro de Cardiff, así como la mejora de ciertas infraestructuras ferroviarias.

El grupo español, a través de su filial británica Amey, y su socio galo, controlado por el operador ferroviario público del país SNCF, se han hecho con el contrato a través de un concurso público al que concurrieron un total de cuatro consorcios. Ferrovial y Keolis comenzará a prestar el servicios, que hasta ahora estaba en manos de Arriva, a partir del próximo 14 octubre, una vez que se confirme y se formalice la adjudicación. Los nuevos gestores subrogarán el personal de este servicio ferroviario.

La compañía británica Amey fue adquirida por Ferrovial en mayo de 2003. En abril de ese mismo año se adquirió también la británica Enterprise. La integración de Amey y Enterprise dio lugar a una nueva compañía con una de las ofertas más diversificadas en el Reino Unido. Con una plantilla de 21.000 empleados, una facturación de más de 3.000 millones de euros y una cartera superior a los 16.000 millones, Ferrovial Servicios gestiona en el Reino Unido más de 320 contratos con un amplio rango de soluciones integradas, desde el mantenimiento de infraestructuras viarias o ferroviarias hasta la gestión integral de los residuos o la gestión del ciclo de vida de los activos.

El grupo que preside Rafael del Pino entró en ‘números rojos’ en el primer trimestre del año al registrar una pérdida de 161 millones de euros tras provisionar 237 millones para cubrir posibles pérdidas por los problemas surgidos en un contrato de servicios y mantenimiento en la ciudad británica de Birmingham. Se trata de la primera vez que contabiliza pérdidas desde las que se anotó en 2008, también por el negocio en Reino Unido, en esa ocasión por el impacto de una reforma fiscal del país, y en 2009, por un efecto contable tras vender el aeropuerto de Gatwick.

Nuevo contrato-programa de Renfe en junio

Renfe firmará este próximo mes de junio su nuevo contrato-programa con el Estado, el documento por el que la compañía ferroviaria recibe el encargo de explotar los servicios ferroviarios considerados públicos, los de Cercanías y Regionales, y cobra la correspondiente subvención pública. Así lo adelantó el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, durante su intervención en el pleno de debate de enmiendas de los Presupuestos en el Congreso.

La firma del nuevo contrato-programa tendrá así lugar seis meses después de que en diciembre de 2017 el Gobierno aprobara el nuevo listado de trenes considerados de servicio públicos, los que mayor número de viajeros transportan, que además supuso un aumento respecto a la relación que estaba vigente hasta entonces.

En cuanto a las subvenciones, por el momento, y a expensas de firmar este documento, los Presupuestos Generales del Estado de 2018 contemplan un pago de 1.190 millones de euros a Renfe por explotar estos servicios. Se trata de líneas que no son rentables económicamente, pero sí socialmente y que, por ello, se mantienen y subvencionan para garantizar la movilidad de los viajeros, determinadas conexiones y la vertebración de distintos territorios. La firma del contrato-programa de Renfe marcará también la voluntad del Gobierno de que la compañía ferroviaria mantenga o no el monopolio en la prestación de estos servicios públicos una vez que el transporte de viajeros en tren se abra a la competencia en toda la UE a finales de 2020.

El eventual mantenimiento del monopolio de Renfe en estos servicios dependerá del periodo de vigencia para el que se firme el contrato programa y gracias a las posibilidades que otorga para ello las directivas comunitarias sobre la liberalización. Estas normas europeas permiten que los distintos Estados puedan seguir encomendando directamente y sin competencia estos servicios públicos de Cercanías y Regionales convencionales al operador dominante de cada país, en el caso español a Renfe, hasta el año 2024.

Será a partir de ese año 2024 cuando ningún país pueda ya conceder los servicios públicos ferroviarios directamente a un operador. No obstante, a pesar de no poderse conceder, sí se permitirá su explotación, dado que la misma norma comunitaria contempla que hasta el mismo año 2023 se pueda conceder a un operador la prestación de Cercanías por un plazo de diez años, prorrogable por otros cinco. Así, en el caso de que esta encomienda de explotación de servicios públicos a Renfe se ratificara el mismo año 2023 y se aplicara la prórroga, la prestación en monopolio de estos transportes ferroviarios se garantizaría hasta 2037.

Talgo, Alstom, CAF y Siemens a por el megacontrato

Alstom, Siemens, Talgo y CAF iniciarán este viernes la puja por el doble ‘macrocontrato’ de mantenimiento de trenes que Renfe ha sacado a concurso, que supone realizar estos trabajos en un total de 420 vehículos de Cercanías y Avant durante cinco años por un importe total de 450 millones de euros. Los cuatro fabricantes ferroviarios presentarán a la operadora sus solicitudes para participar en la puja, con la que ‘calientan motores’ de cara al «histórico» plan de compra de nuevos trenes que Renfe prevé lanzar próximamente.

El doble contrato actualmente en liza abarca casi una tercera parte (el 30%) del parque total de trenes de la compañía ferroviaria pública, que suma unas 1.360 unidades. En concreto, Renfe ha sacado a concurso el mantenimiento de veinte trenes de Alta Velocidad Media Distancia (Avant) por un importe de 74,5 millones de euros. El otro contrato licitado abarca la prestación de estos mismos trabajos en unos 391 trenes de Cercanías de los núcleos de Madrid y Barcelona, y en nueve trenes de vía estrecha de la extinta Renfe por otros 329 millones.

En el caso de este último contrato, Renfe lo ha estructurado en siete lotes, de forma que los fabricantes interesados pueden presentar oferta por alguno de ellos o por todos. Los lotes oscilan entre los 8,60 millones que supone el mantenimiento de la decena de trenes de vía estrecha, hasta los 75,5 millones a los que asciende el del mantenimiento de 86 trenes de Cercanías de Barcelona.

En todos los casos, la compañía o compañías adjudicatarias de los trabajos deberán acometerlos junto con los talleres de Renfe mediante la constitución de una sociedad conjunta con la operadora ferroviaria pública que controlarán al 51%. De hecho, en el caso de Siemens, competirá a través de Nertus, la firma de mantenimiento que ya tiene constituida con la compañía ferroviaria, según detallaron en dichas fuentes del sector. Además, en virtud de los pliegos de contratación, los adjudicatarios deberán cumplir con un «elevado grado de fiabilidad y disponibilidad de los trenes, especialmente en horas punta, y garantías de calidad y seguridad».

Renfe abre la contratación de estos trabajos de mantenimiento en tanto la industria ferroviaria está pendiente del lanzamiento de su anunciado plan de compra de nuevos trenes, que comprenderá todo tipo de vehículos, especialmente de Cercanías y Mercancías, pero también de Alta Velocidad. «Nunca en la historia se ha lanzado una licitación de compra de nuevos trenes como la que se hará en 2018», avanzó recientemente respecto al plan el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, quien no concretó el importe inversor, si bien apuntó que será «importantísimo».

En la actualidad, Renfe cuenta con un parque de unos 1.361 trenes, de los que unos 168 corresponden a AVE y Larga Distancia, otros setenta a Larga Distancia convencional y 62 a Media Distancia de Alta Velocidad (Avant). Unos 660 trenes más son de Cercanías, 300 más regionales convencionales y otros 107, trenes de ancho métrico de la extinta Feve.