El tráfico ferroviario en Francia se verá afectado por una huelga de 36 horas que empieza hoy a las 20.00 locales (19.00 GMT) convocada por cuatro sindicatos que denuncian la supresión de empleos y la reestructuración del transporte de mercancías. La Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF) anticipó que durante el paro seguirán en servicio de media dos de cada tres trenes de alta velocidad (TGV) y la mitad de los otros convoyes de largo recorrido con trayecto interior, así como la mitad de los regionales y dos terceras parte de los cercanías de París.
Hasta el jueves a las 8.00 locales (7.00 GMT) funcionará la casi totalidad de los trenes internacionales: los Elipsos de noche desde París a Madrid y Barcelona, así como los del sentido inverso; los Thalys que conectan con Bélgica, Holanda y Alemania; los Eurostar a Londres; los Lyria a Suiza; los Artesia a Italia. Una de las pocas excepciones serán los Talgo diurnos con origen y con destino en España, que quedan suspendidos mañana.
La dirección de la compañía, que ha establecido este programa a partir únicamente de los conductores y de los revisores que han anunciado que secundarán el paro, augura un seguimiento similar al de la huelga del pasado 20 de octubre.
En esa movilización, organizada por los mismos motivos que la actual, habían participado entre el 24% y el 32% -según las fuentes- de los trabajadores de la SNCF