Archivo mensual: septiembre 2010

«Los sueños pueden arder»

Después del acto vandálico que ha acabado prácticamente con el ferrobús de Barruelo de Santullán son muchas las voces que se han alzado dentro del mundo ferroviario reclamando mayor y mejor protección para el patrimonio. No es el primer vehículo que se ha perdido en los últimos años en este país y, por desgracia, no será el último. Dentro del sector ferroviario hay un clamor ante la indefensión en que se encuentran los numerosos vehículos de otras épocas que se hallan dispersos por todo el país. La falta de medios y la desidia están acabando con estas joyas del patrimonio ferroviario.

El último maquinista del ferrobús de Barruelo de Santullán, Juan Carlos Enguix, miembro de Arpafer y Abuaf, ha escrito un relato conmovedor a tenor de los desgraciados incidentes que casi han destruido esta joya ferroviaria. Gracias a otro de los miembros de Arpafer, Tono Melón, puedo haceros partícipes de las impresiones del último maquinista del ferrobús de Barruelo de Santullán. Aquí os dejo el texto completo.

«Los sueños pueden arder. La semana pasada ardió uno de ellos en la montaña palentina. Ardió el tren. No un tren, sino el tren. Porque era único, sólo él podía dar vida a un proyecto ambicioso y repleto de dificultades que tenazmente había ido sobreviviendo a todas las voces que clamaban su inviabilidad.

Aquel tren ferrobús, él último en marcha de toda España, encarnaba muchas significaciones dentro de sus paredes plateadas y su interior de “formica” verde claro. Para las gentes de Barruelo, Cillamayor, Nestar, Villavega y Menaza era la posibilidad de reconvertir el viejo tren minero en un recorrido turístico y cultural que infundiese nuevo valor a las muchas cosas ya hechas en el valle para atraer turismo de calidad. Para la montaña palentina, el tren como eje del parque minero-ferroviario era un proyecto único en su género que hubiese situado aún más en el mapa a esta comarca montañesa de increíble belleza e inagotables recursos. Para Castilla y León podría haber sido muy bien la excusa para obtener mayor capacidad de gestión de sus transportes interiores, y también para crear una incipiente área de transporte ferroviario en su Consejería de Fomento. Y para España, el ferrobús de Barruelo encarnaba los transportes de cercanías y rurales de los años 60, el salto al progreso y a la modernidad, la esperanza de un futuro por fin mejor tras las penurias de una postguerra y una autarquía que nunca acababan. Efectivamente, este pequeño torpedo plateado surcó toda la geografía española desplazando a los viejos trenes de coches de madera de antes de la guerra, y ha sido acusado de ser el verdugo de los trenes de vapor, aunque fue una evolución incuestionable y necesaria en el transporte para el país. Otra cosa es la preservación de las locomotoras de vapor significativas en España, pero eso, y los museos del ferrocarril por cierto, son temas para otro día.

El tren ardió y tocaría empezar de nuevo. Todo debiera haber sido más fácil. No tiene interés seguir si no se producen profundos cambios en las administraciones que tutelan este patrimonio público. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias Adif, un ente público adscrito al Ministerio de Fomento gestiona con absoluta libertad las líneas ferroviarias clausuradas, que con la nueva legislación sobre el sector ferroviario pasaron a formar parte de sus activos patrimoniales. Es decir, las líneas cerradas con sus vías y estaciones son patrimonio de Adif, y este ente decide libremente qué usos les da, si decide levantarlas o no y qué iniciativas permite y cuáles no. Adif se ha mostrado hasta hoy absolutamente impermeable a cualquier proyecto que suponga poner un tren a circular en una vía cerrada. No, no y no. Se alegan cuestiones de responsabilidades subsidiarias, de regulación del sector – unas normas pensadas para grandes líneas y grandes operadoras, que no encajan con pequeñas iniciativas – y de seguridad. Todo ello subsanable si hubiera verdaderos deseos de crear actividad y de promover la reutilización de las vías cerradas.

Desde Adif y desde los ministerios de Fomento y Medio Ambiente, sólo se anima y ayuda a los organismos de promoción territorial – tipo grupos Leader, por ejemplo – en la creación de vías verdes. Las vías verdes son la “solución oficial” que un día se decidió para toda vía cerrada o susceptible de cerrar en España. Y no se hable más del tema. Punto. O vía verde o nada. Para proyectar y ejecutar un vía verde hay recursos y ayuda en la gestión. Para un proyecto de tren turístico que suponga el terrible pecado de querer circular con un tren tu-ris-ti-co o bien his-tó-ri-co sobre la vía, ni agua.

Sólo se puede esperar y desear una decidida acción del ministerio de Fomento, en la que se proponga abrir los miles de kilómetros de líneas cerradas a pequeñas iniciativas particulares de trenes turísticos y de pequeños ramales aportadores de mercancías a las grandes líneas. Transfiriéndolos o no a las Autonomías, da igual. Pero creando desde luego el marco adecuado y ordenando sin más a Adif que facilite también la consecución de estas iniciativas, en lugar de hacer de perro del hortelano.

De momento, con el ferrobús quemado, se pierden muchas cosas. Se pierde la pieza dinámica del proyecto del parque minero de Barruelo, la que servía para conectar todos los recursos del proyecto. Se pierde un patrimonio ferroviario de la historia de España de primer orden, como ya hemos explicado. Y se pierden además muchos “intangibles”. Se pierden las sonrisas de muchos niños y padres que no podrán “montarse y andar en el tren” como decían. Se pierde un poco el orgullo de un pueblo que quería ser capaz de hacer más cosas. Se pierde la esperanza de todos aquellos que dedicamos tiempo y dinero al proyecto, viajando, pasando frío y trabajando duro. Hay que rendir homenaje a todos los voluntarios que pusieron su esfuerzo en cuidar y mantener al ferrobús, mientras vivió.

Y para mí, que vengo de otras tierras, se pierde el vínculo, la excusa, el motivo por el que llegué un buen día de 1995 para dedicarme a este y otros proyectos de trenes rurales, para pasar del hablar al hacer, para crear algo aquí porque esta tierra se lo merece. La excusa del tren sirvió para que entablase una relación profunda y muy íntima con la esencia del norte de Castilla. A mí se me ha quemado, además de un sueño, un trocito de alma.

No quedan ganas, la verdad, de proseguir en estas lides si no se arregla el panorama institucional y administrativo y se facilita a los pequeños emprendedores el camino. Si esto no pasa se habrán quemado todos los sueños».

(Imagen FER y JCE)

El tren recibe un homenaje en el Museo de las Ferias de Medina del Campo

El mundo ferroviario recibe un homenaje. Ciento cincuenta años después de su llegada a Medina del Campo, la villa medinense rinde tributo al ferrocarril La Fundación Museo de las Ferias de Medina del Campo realiza su particular homenaje al ferrocarril en la pieza del mes de septiembre, formada por un conjunto de documentos oficiales, fotografías históricas y materiales relacionados con la primera estación de viajeros construida en la localidad. Hace ahora 150 años, el 3 de septiembre de 1860, llegaba a la estación «vieja» del ferrocarril la primera locomotora de vapor que permitió a este municipio vallisoletano conocer una segunda época de florecimiento de todo orden, que se extendió hasta los años treinta del siguiente siglo.

El ferrocarril ha constituido el auténtico pilar del desarrollo de la Medina contemporánea, cuyas primeras obras se llevaron a cabo en terrenos próximos al desaparecido monasterio de San Bartolomé, muy cerca del actual paso a nivel, siendo bendecidas con el boato propio de la época, el 15 de abril de 1857. Culminaba entonces un período de negociaciones que fue llevado a buen puerto gracias a la decisiva intervención de Claudio Moyano, quien consiguió la implantación en la villa de un importante punto ferroviario de la entonces denominada Compañía de los Caminos del Hierro del Norte de España.

La «estación vieja», la primera que hubo en el municipio, fue construida en las inmediaciones del solar que antes ocupara la parroquia de San Pedro, como un edificio rectangular con puertas molduradas de medio punto que disponía de dos muelles de mercancías, uno cubierto y otro descubierto, y un edificio para locomotoras.

La llegada del primer convoy procedente de Valladolid, el 3 de septiembre de 1860, fue todo un acontecimiento para los medinenses, que fueron convocados por medio de un bando al acto de recibimiento de la locomotora, en cuya comitiva oficial estuvieron presentes la Corporación municipal, representantes de las diferentes administraciones y la banda de música. Tras la llegada del tren hubo un discurso del alcalde, un acto de recibimiento a las autoridades viajeras del convoy inaugural, una visita al Castillo de la Mota y, tras montar las autoridades y parte del público asistente en los vagones de viajeros, se realizó un breve recorrido oficial.

Las celebraciones concluyeron en el Ayuntamiento, donde se sirvió una comida y se presidió la corrida de novillos celebrada en la Plaza Mayor, para finalizar la jornada con un baile de sociedad, según ha recordado el director del Museo de las Ferias, Antonio Sánchez del Barrio.

Las actas oficiales de las ceremonias de inauguración de las primeras obras ferroviarias y de la llegada del primer tren, un ejemplar del bando del alcalde para convocar a los medinenses a este acontecimiento, varias imágenes fotográficas del antiguo conjunto ferroviario y algunas de las placas del edificio primitivo, componen el homenaje que la Fundación ha dedicado al mundo ferroviario.

(Imagen homenaje al ferroviario. Medina del Campo)

Suspendidos los trenes de cercanías y largo recorrido entre Amurrio y Orduña

Los servicios ferroviarios de Renfe, tanto de cercanías como de largo recorrido, se encuentran suspendidos entre Amurrio (Álava) y Orduña (Vizcaya) debido a los daños causados por la salida de la vía de una locomotora de un tren de mercancías, ha informado hoy en un comunicado Renfe. La salida de la locomotora se produjo a última hora de la tarde de ayer en los cambios de vía en la entrada de la estación de Orduña, ciudad vizcaína enclavada dentro de territorio alavés.

Debido a esta incidencia, Renfe ha establecido un servicio de transbordos en autobús entre Amurrio y Orduña dentro de la línea de cercanías C-3, que une Bilbao con Orduña.

En cuanto a los trenes de larga distancia con origen o destino en Bilbao, los transbordos en autobús se realizan entre la capital vizcaína y la estación de Miranda de Ebro (Burgos).

Actualización 17.00 horas. Adif ha restablecido la circulación ferroviaria entre las estaciones de Amurrio y Orduña de la línea que conecta Bilbao con Miranda de Ebro, una vez reparados los daños de la vía provocados por un incidente ocurrido con un tren de mercancías que circulaba la tarde de este jueves, entre Bilbao y Madrid, a la entrada de la estación de Orduña. Los trabajos de retirada del material, y la reparación de los daños en la infraestructura han obligado a movilizar personal de Adif y de Renfe para restablecer el servicio ferroviario.

Por otra parte, para el mantenimiento del servicio público de viajeros, durante el tiempo que la línea ha estado interceptada se ha mantenido un Plan Alternativo de Transporte con transbordos por carretera de los trayectos de cercanías y larga distancia.

Diez mil trabajadores del metro de Londres irán a la huelga la próxima semana

Habrá huelga. No hubo acuerdo. Los empleados del metro de Londres irán a la huelga la próxima semana, tal y como estaba programado, al fracasar las negociaciones que trataban de evitar el paro, convocado en protesta por la decisión de la empresa de reducir la plantilla, informaron los líderes sindicales. El sindicato que agrupa a los empleados de las redes ferroviarias y de metro (RMT) acusó a la empresa London Underground (LU) de «sabotear» las conversaciones en la sede del Servicio de Conciliación Acas, que actúa de mediadora en conflictos laborales. Al no llegar a un acuerdo, unos 10.000 trabajadores del metro de Londres irán a una huelga de 24 horas a partir del próximo lunes por la tarde para mostrar su oposición al plan de la empresa de despedir a 800 empleados.

El secretario general del RMT, Bob Crow, explica que el personal gestor del LU «sabía muy bien que unas conversaciones positivas no podrían salir adelante mientras la amenaza de recortes planeara sobre la cabeza de nuestros miembros. Su fracaso para retirar esa amenaza saboteó cualquier proyecto de realizar progresos». Crow indicó que los negociadores de los sindicatos «demolieron completamente la línea del LU, que sostiene que los recortes afectarán simplemente a la nueva tecnología y a la tarjeta ‘ostra’ (de recarga de crédito para financiar los viajes en metro)».

Según este responsable, los recortes planeados forman «parte de un agujero negro multimillonario al que se enfrenta el alcalde (de Londres, Boris Johnson), debido a los costes que ha tenido el fracaso de la privatización del metro». Agregó el responsable de RMT que «no sólo se encuentran amenazadas las oficinas de billetes de metro y los trabajos de esos empleados, sino también cientos de otros puestos». El secretario general del RMT recordó que «fue la presencia de esos empleados lo que evitó desastres potenciales en incidentes ocurridos recientemente, como incendios producidos en las estaciones de Euston y de Oxford Circus».

Al primero de los paros que comenzará en la tarde del 6 de septiembre, el mismo día en que el Parlamento reanuda sus sesiones tras el receso estival, están llamados los trabajadores encargados del mantenimiento y la reparación de los trenes.

Si no se llega antes a un acuerdo, los paros se repetirán los días 3 de octubre y 2 y 28 de noviembre y a éstos están convocados también los conductores, los encargados de señalización y el personal de estación, como controladores y taquilleros.

Los sindicatos convocantes calculan que unos 10.000 trabajadores participarán en las protestas, que de llevarse a cabo causarán el caos en una red que registra diariamente algo más de tres millones de viajes.

(Imagen Chris McKenna en Wikimedia Commons)

Adif mantiene «inalterable» que el TAV esté operativo en 2016

El TAV para 2016. El presidente de Adif, sociedad estatal gestora de las infraestructuras ferroviarias, Antonio González, ha confirmado que el Ministerio de Fomento mantiene «inalterable» el compromiso de que la línea de tren de alta velocidad que pasa por el País Vasco esté operativa para el 2016. Tras recordar que el Gobierno central invertirá 4.178 millones en esta infraestructura, ha dejado claro que, pese a los recortes provocados por la crisis económica en distintos sectores, no se ha rescindido ningún contrato para este proyecto. Por lo tanto «la conclusión de estas obras se mantiene inalterable para el 2016».

El presidente de Adif ha acudido, junto con el consejero vasco de Transportes, Iñaki Arriola, y la subdelegada del Gobierno en Álava, Gloria Sánchez, a la culminación de la primera fase de excavación del túnel de Induspe, incluido en el tramo Eskoriaza-Aramaiom de la «Y vasca». González ha subrayado que esta primera fase de este túnel es un «paso firme en el compromiso de Fomento por dotar a esta tierra de las más modernas infraestructuras ferroviarias» y un ejemplo de su «gran apuesta por el futuro de Euskadi».

Arriola cree que la culminación de la primera fase del citado túnel es «un paso más en uno de los proyectos más importantes y de mayor trascendencia de los que se están llevando a cabo en Euskadi».

El túnel de Induspe, de 2.224 metros de longitud, se localiza en el tramo Escoriatza-Aramaio, de 5,6 kilómetros, de los que aproximadamente dos terceras partes discurren soterrados. Una vez concluida la perforación de la parte superior, se acometerá la fase de excavación de la parte inferior.

En total, Adif trabaja en trece de los veinte tramos en los que se ha dividido la ejecución de la obra, en un total de 54,2 kilómetros. Así, están en ejecución un total de 17 túneles, mientras que están terminados o en ejecución 29 viaductos. Asimismo, esta sociedad, según ha explicado González, invierte una media del 12% del coste total de las obras en la protección medioambiental de trazado.

Entre la medidas que lleva a cabo, destaca la instalación de un sistema de recogida y evacuación de las filtraciones y vertidos en los laterales de los túneles, así como la plantación de 118.623 árboles autóctonos.

(Imagen José Montes)

Sagunto-Vigo, uno de los corredores de mercancías más largos de la Península

Tren y carretera compiten por las mercancías. El nuevo corredor Levante-Portugal-Galicia, que parte desde la ciudad de Sagunto (Valencia) con destino Vigo (Galicia), ha iniciado su funcionamiento con uno de los recorridos de mercancías más largos de la Península Ibérica, ya que alcanza los 1.330 kilómetros por sentido. Según han informado en un comunicado fuentes de Ibercargo Rail, una de las dos empresas responsables del proyecto, el primer tren de esta nueva línea partió el lunes desde Sagunto a las 21.30 horas, con una capacidad de 1.200 toneladas y carga multiproducto.

El nuevo servicio contará con una frecuencia de cuatro trenes semanales en cada sentido, con salidas desde Sagunto los lunes, martes, jueves y viernes, y desde Vigo los martes, miércoles, viernes y sábados. Se espera que este corredor, en el que se han invertido 20 millones de euros, mueva más de 250.000 toneladas al año en un recorrido medio de más de 1.000 kilómetros.

Respecto al trayecto, el tren realizará el recorrido por las localidades españolas de Sagunto, Silla, Madrid y Fuentes de Oñoro, antes de pasar a Portugal y pasar por Guarda, Aveiro, Estarreja, Oporto y Valença do Miño y finalizar en Vigo, de nuevo en España. Los trenes cruzarán en dos ocasiones la frontera entre España y Portugal sin realizar paradas y sin cortes ni cambios, gracias a la utilización de locomotoras interoperables.

La puesta en marcha de esta nueva línea, con una duración en ambos sentidos de 30 horas, permite conectar por tren multimodal la Comunitat Valenciana con Portugal y Galicia. Se espera que este transporte ferroviario permita suministrar de una forma más competitiva a las plantas automovilísticas de Vigo y Palmela (Portugal).

Según ha explicado el presidente de Ibercargo Rail, Ignacio Barrenechea, este corredor permitirá transferir gran parte de las cargas que actualmente se trasladan por carretera, puesto que el tiempo de tránsito es similar.