Máxima expectación en el mundo ferroviario. Talgo está a punto de desvelar el secreto mejor guardado. El próximo 19 de septiembre el ‘proyecto Avril’ verá la luz. Por primera vez, el fabricante ferroviario español presentará una locomotora y un coche de pasajeros reales durante el transcurso de InnoTrans 2012, el prestigioso salón de material ferroviario que cada dos años se celebra en Berlín. Los dos vehículos partieron del puerto de Santander con destino al de Lübeck donde ya han sido descargados para, desde allí, continuar viaje a Berlín.
Talgo mantiene oficialmente su hermetismo sobre este proyecto, en el que ha puesto tantas esperanzas y que no parace llegar en el mejor momento para hacerlo apeticible a los inversores extranjeros. La compañía que preside Carlos Palacio de Oriol seguirá con su política hermética y no dará más detalles sobre su nuevo tren de alta velocidad hasta dentro de quince días. Lo poco que se sabe de esta joya de la tecnología ferroviaria procede del certamen BCN Rail de 2099 y de la edición de 2010 de la feria de Berlín, aunque se trataba simplemente de una maqueta. En esta ocasión, el prototipo será muy parecido al que se comercializará en los próximos años.
El ‘Avril’ tendrá capacidad para alcanzar los 380 kilómetros por hora y podrá albergar 550 pasajeros en dos clases. La clave de su capacidad es la disposición de los asientos, que se configurarán tres a un lado del pasillo y dos al otro. Este diseño facilita la posibilidad de ofrecer a los clientes una versión low cost (sólo con clase turista), en la que habrá más de 730 pasajeros gracias a una modificación en las que los equipos de tracción estarían bajo el bastidor del tren, lo que dará más espacio interior para el cliente. Además, los avances en el reparto del tren tienen una repercusión positiva en su peso, que se reduce hasta en un 30 por ciento si se compara con otros trenes de alta velocidad que ya operan en el mercado.
El esperado proyecto de Talgo llega con cierto retraso. La intención inicial era que ya en el año 2011 un tren con cabezas motrices estuviera circulando en pruebas, pero la crisis económica y, sobre todo, el parón de nuevos contratos para comprar material rodante por parte del Ministerio de Fomento han sido un hándicap para el desarrollo del ‘Avril’. Algo parecido le ocurrió al otro gran fabricante español, CAF, con su proyecto Oaris. La liberalización del transporte ferroviario de pasajeros del próximo verano, vuelve a dar esperanzas al fabricante ferroviario español que piensa en su proyecto estrella para cubrir los nuevos servicios de la alta velocidad.
(Fuente El Economista. Imagen Vía Libre)