Los rateros siguen cebándose con las instalaciones ferroviarias. La Guardia Civil ha detenido a dos ciudadanos portugueses cuando intentaban vender en una chatarrería raíles que habían robado del trazado del ferrocarril en Huelva, justo en el momento en que los agentes inspeccionaban el establecimiento. Los dos individuos se presentaron con el material robado en la chatarrería cuando los agentes realizaban una inspección en el establecimiento de la localidad de Moguer, conocida por ser un frecuente punto de llegada de metales.
Los guardias civiles se encontraban en el lugar realizando verificaciones de personas y mercancías y comprobando que los metales que llegaban al lugar fueran de procedencia legal y no fruto de pequeños robos. En esas labores detectaron la presencia de una furgoneta de color blanco y matrícula de Portugal, que llegó hasta las puertas del recinto, por lo que indicaron a sus ocupantes a que abrieran las puertas del vehículo. A bordo iban los dos hombres ahora imputados; en la furgoneta figuraba como mercancía para ser vendida en la chatarrería, un total de nueve raíles de vías de tren, cortadas para que cupieran en la zona de carga de la furgoneta, además de varios cajones repletos de tornillería para unir raíles, material que fue incautado.
Según averiguó la Guardia Civil, tras indagar sobre la procedencia de los raíles, éstos habían sido robados en el antiguo trazado férreo que unía las localidades de Tharsis y San Bartolomé de la Torre. Un responsable técnico del Ayuntamiento de la localidad presentó la correspondiente denuncia, mientras que la Guardia Civil ha instruido las correspondientes diligencias que, en unión de los imputados, han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Moguer.
El robo de cobre y otros metales en las líneas de ferrocarril comienza a ser una plaga que trae de cabeza a las operadoras ferroviarias de toda Europa, debido a los trastornos que causa en el servicio. Los ladrones provocan daños millonarios y continuas molestias a los viajeros que utilizan el transporte. Y en la UE se comienzan a trazar planes para acabar con esta práctica destructiva y declarar la guerra a los ladrones.
También al ‘otro lado del charco’ el robo de raíles y otro material de las líneas ferroviarias trae de cabeza a operadoras y Policía. No hace mucho la Administración de Infraestructuras Ferroviarias (Adifse) argentina, lanzó una línea 0800 para que la población denuncie cualquier hecho de robo de material ferroviario, como parte de un plan coordinado con las fuerzas de seguridad.