De noche y, a la altura de Aranjuez, la brusca sacudida del tren despertó a los pasajeros que dormitaban camino de Málaga en el expreso ‘Picasso’ que sale de Bilbao. Pasadas las cuatro de la mañana, el tren –que partió de la villa a las 9.15 horas y que llegó a su destino sobre las 11.00– fue escenario de un episodio totalmente insólito. Según el testimonio de los pasajeros, un ladrón aprovechó que la mayoría de los viajeros estaba durmiendo para meterse en un compartimento de coche-cama y robarle algunas pertenencias a una mujer. Así lo cuenta hoy Solange Vázquez en El Correo de Bilbao
Hasta aquí, un delito que, aunque no es habitual, sobre todo en los servicios de largo recorrido, tampoco se sale fuera de lo normal. Lo que sí resultó inaudito fue la reacción posterior del delincuente, que para abandonar el lugar de los hechos lo antes posible no se le ocurrió otra cosa que tirar del freno de emergencia. En ese momento, el ‘intercity’, que se encontraba en las inmediaciones de Aranjuez, hizo un brusco parón en su marcha y el caco se dio a la fuga, perdiéndose en la oscuridad y dejando a parte de los pasajeros desvelados y preocupados. Algunos testigos que iban a bordo manifestaron su inquietud al percatarse del incidente, ocurrido a pocos metros de donde ellos mismos dormían: sí lo cuenta Solange Vázquez en El Correo de Bilbao
Según fuentes de toda solvencia, este caso «está totalmente fuera de lo común». «Lo normal es que el ‘modus operandi’ de los ladrones que actúan en los trenes sea muy diferente. Su principal interés es pasar desapercibidos, Por eso, suelen comprar su billete y viajar con normalidad hasta que cometen el delito». Normalmente, se pasean por la zonas de los coches-cama por si tienen la suerte de encontrarse con algún compartimento abierto. Entonces, entran sigilosamente y, sin despertar a la víctima, le arrebatan el bolso o las maletas. «A veces incluso usan un ‘spray’ adormecedor», indican las mismas fuentes. Y, una vez con el botín en sus manos, se bajan tranquilamente en la siguiente estación, sin levantar ninguna sospecha. «Lo que es totalmente inusual es que tiren del freno de emergencia, algo que les delata de inmediato y que es una práctica que entraña muchos riesgos. Si el tren llega a llevar mucha velocidad, podría haber habido problemas, porque se obliga al convoy a parar en seco», indican.
De todas formas, lo sucedido en esta útima semana en el expreso Bilbao-Málaga es para olvidar. Cinco viajeros denunciaron ante Renfe la existencia de una plaga de chinches en el tren hace seis días. Al día siguiente, el tren nocturno chocó a su paso por tierras alavesas con una máquina excavadora que había invadido la línea férrea y, esta última noche, el robo con la parada de emergencia. Alguien que lo ha mirado torcido, que diría un menda para tratar de buscar una explicación coherente a tanto infortunio.
(Fuente El Correo. Imagen Jordi Alemany)