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Japón prepara un tren de super alta velocidad por levitación magnética entre Tokio y Nagoya para 2027

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La operadora ferroviaria nipona Central Japan Railway ha presentado su proyecto para construir un servicio de tren de levitación magnética capaz de alcanzar los 600 kilómetros por hora y que planea tener operativo en 2027. La empresa, que ya había comenzado las pruebas con estos nuevos modelos de trenes de alta velocidad, conocidos como ‘Maglev’ («magnetic levitation»), comenzará las labores de construcción de esta nueva línea, que contará con seis estaciones, de super alta velocidad a partir de 2014.

Para realizar sus pruebas, la operadora ha contado con un trayecto de 42,8 kilómetros de vía dotada de curvas y túneles en la prefectura de Yamanashi, al oeste de Tokio.

Central Japan Railway espera inaugurar su primera ruta comercial entre las ciudades de Tokio y Nagoya en 2027, un trayecto de 286 kilómetros que el nuevo modelo completará en unos 40 minutos, en lugar de los 100 actuales que tarda el servicio de alta velocidad ‘shinkansen’ (tren bala), detalló la agencia Kyodo.

Los trenes ‘Maglev’ funcionan a través de un sistema de levitación magnética que usa motores lineales instalados cerca de los raíles. Gracias al campo magnético, el tren se eleva hasta 10 centímetros por encima de los raíles, eliminando el contacto y con el aire como único elemento de fricción, lo que permite que el tren gane más impulso.

La empresa, que opera el ‘shinkansen’ que une las cuatro mayores urbes del país (Tokio, Yokohama, Osaka y Nagoya), utiliza para sus trenes de levitación imanes superconductores a una temperatura de menos 273 grados centígrados (el llamado cero absoluto), con lo que logra anular la resistencia eléctrica e incrementar la velocidad. La operadora espera extender esta línea Tokio-Nagoya hasta la ciudad de Osaka para 2045.

También trabajan en otros proyectos futuristas Alemania y el multimillonario estadounidense Elon Musk, con su revolucionario ‘Hyperloop’, aunque también Corea y China trabajan en la búsqueda de prototipos que rompan la velocidad comercial y en mejoras del ‘maglev’.

El proyecto «Next Generation Train» alemán se presenta como la generación de trenes del futuro. En esta idea colaboran nueve institutos que forman parte de la Asociación Helmholtz. Las expectativas son altas: el tren debería alcanzar los 400 kilómetros por hora, ser más seguro y más ecológico que los trenes de hoy en día. El diseño consta de dos plantas sin escaleras por dentro. Los pasajeros de la primera clase suben directamente a la planta de arriba y los de segunda abajo. El acoplamiento de los coches será muy sencillo y se llevará a cabo a través de sensores. En caso de colisión, el morro del tren se comprime sobre sí mismo para que se pueda cambiar fácilmente.

Elon Musk, el multimillonario de origen sudafricano y consejero delegado de la firma de automóviles eléctricos Tesla, presentó recientemente su nuevo proyecto ‘Hyperloop’. El artilugio que plantea es un innovador medio de transporte, similar al tren, que es capaz de recorrer cerca de 400 kilómetros en 35 minutos (en velocidad punta alcanzaría los 1.200 kilómetros por hora). En un artículo en su blog, Musk explicó que este revolucionario proyecto, que utiliza cápsulas propulsadas por energía solar, surge como alternativa a la construcción de un tren de alta velocidad entre las ciudades estadounidenses de Los Angeles y San Francisco. La infraestructura consiste en dos tubos de acero (uno en cada sentido de la marcha) sostenidos sobre pilares de seis metros de altura dispuestos cada 30 metros y el sistema se alimenta con energía solar. Las cápsulas en las que viajarían los pasajeros presentadas por el millonario estadounidense podrían recorrer la distancia entre Los Angeles y San Francisco (381 kilómetros) en 35 minutos. La velocidad máxima que podrían alcanzar sería de 760 millas por hora (más de 1.200 kilómetros por hora).

Y en los próximos meses se lanzarán más ideas para propiciar la super alta velocidad que no está tan lejos como algunos pueden suponer.

El shinkassen de Tokio a Aomori volverá a funcionar el 29 de abril tras el parón por el tsunami


Japón se recupera. Lentamente el país del sol naciente vuelve a la vida. Todas las líneas del shinkassen estarán plenamente operativas a partir del próximo 29 de abril. Ayer se inició el servicio entre Tokio y Sendai, mientras que la compañía JR East asegura que el viernes volverá también a funcionar todo el trazado de esta línea de alta velocidad que une la capital nipona y la ciudad de Aomori, en el extremo norte de la isla de Honshu.

Las islas principales de Japón, Honshu y Kyushu, están comunicadas por una red de líneas de alta velocidad ferroviarias que conectan Tokio con la mayoría de las principales ciudades del país. Los trenes de alta velocidad, operados por Japan Railways (JR), también se vieron afectados por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo que paralizaron las líneas ferroviarias en el norte del país, destruyeron infraestructuras básicas y dejaron 14.340 muertos y 11.889 desaparecidos, según los últimos datos de la policía japonesa.

East Japan Railway, la empresa que opera las líneas en la región que resultó devastada por el terremoto y el tsunami, asegura que sus trenes bala pudieron activar los frenos de emergencia segundos antes de que se produjera el temblor, debido a sus sistemas de alerta temprana. Tenía 27 shinkansen funcionando en el noreste de Japón cuando la tierra se quebró, pero todos ellos se detuvieron sin descarrilar.

La recuperación del servicio tras casi mes y medio de parón se debe a que ayer se restableció el tramo entre la ciudad de Fukushima y Sendai, capital de Miyagi, provincia en la que el desastre dejó 8.669 muertos y 6.856 desaparecidos, según el último recuento policial. Se espera que la restitución de la alta velocidad entre Tokio y Sendai, unos 200 kilómetros al norte de la capital nipona, ayude a acelerar la reconstrucción y a potenciar el turismo en la región de Tohoku, la más afectada por el tsunami.

La compañía operadora, JR East, asegura que el viernes, 29 de abril, volverá también a funcionar todo el trazado de esta línea de Shinkansen, que une Tokio y las ciudades de Ichinoseki y Shin Aomori , en el extremo norte de la isla de Honshu.

El servicio ferroviario funciona casi con normalidad a lo largo de todas las líneas de trenes, excepto algunos trazados costeros directamente afectados por el tsunami, que permanecerán fuera de servicio por un período de tiempo más pronunciado, aunque no son esenciales para los viajes interregionales.

Debido a la suspensión parcial de la Tohoku Shinkansen, se han prolongado los tiempos de viaje entre Tokio y el norte de la región de Tohoku. Los viajes en avión no constituyen una alternativa fácil, porque los vuelos están muy demandados por viajeros que normalmente tomarían el shinkansen.

Los shinkansen son claves para el transporte en Japón, un país con 127 millones de habitantes y una gran densidad de población. Funcionando a velocidades de hasta 300 kilómetros a la hora, ‘el tren bala’ japonés es famoso por la puntualidad (la mayoría de los trenes salen al momento exacto), comodidad (coches relativamente silenciosos que cuentan con amplios asientos, orientados hacia el sentido de la marcha), seguridad (no se ha producido nunca ningún accidente mortal) y eficiencia.

La red consta de varias líneas, entre las que el shinkansen Tokaido (Tokio – Nagoya – Kyoto – Osaka) es la más antigua y más popular. Todas las líneas de shinkansen (excepto el de Akita y Yamagata Shinkansen) transcurren por vías construidas exclusivamente para los trenes de alta velocidad. La mayoría de los trayectos tiene distintas categorías de trenes, que van desde la más rápida, que sólo se detiene en las estaciones principales, a la más baja que para en cada una de las estaciones de la ruta.

El transporte desde Tokio hasta el norte de la región de Tohoku es probable que siga siendo difícil hasta el final de la ‘Semana de Oro’, a principios de mayo. Después, se prevé que se normalice la situación en todo Japón, excepto en las zonas afectadas por el tsunami y las ciudades cercanas a la zona afectada por la catástrofe nuclear de Fukushima.

La operadora ferroviaria tiene instalados nueve sismógrafos en diferentes puntos del tendido y la costa del Pacífico. El 11 de marzo, uno de ellos, en la prefectura de Miyagi, detectó una aceleración de 120 gal (centímetros por segundo al cuadrado), que es el valor de referencia para detener el funcionamiento de los trenes. El sistema cortó automáticamente el suministro eléctrico a los convoyes, y todos aplicaron los frenos de emergencia para reducir la velocidad.

(Imágenes DAMASA y Hisagi (氷鷺) en Wikimedia Commons)

La red del shinkansen sigue parada al Noreste de Japón y con retrasos en el resto del país

Japón sigue viviendo una pesadilla. Tras sufrir el peor terremoto de los últimos 140 años de su historia y recibir el golpe de un devastador tsunami, el país sigue contando los millonarios daños pendiente aún de lo que suceda en dos de sus centrales nucleares. El ferrocarril tampoco ha escapado al desastre. La mayor parte de las líneas del Noreste de Tokio han desaparecido y su gran estrella, el shinkansen, apenas circula por alguno de sus veloces trazados.

Las líneas del shinkansen de Tohoku, Akita, Yamagata se encuentran paradas, mientras los retrasos son continuos en las de Joetsu, Nagano, según informa en su web Japan Railways. La operadora desconoce cuándo se podrá reanudar el servicio de las tres primeras, a la espera de evaluar la estabilidad de la red y los daños que se hayan podido producir en la misma. Sólo funcionan sin contratiempos las líneas del tren bala de Tokio-Shin Osaka (Tokaido shinkansen) y la de Shin Osaka-Hakata (Sanyo shinkansen).

La operadora asegura que no puede estimar los plazos para la recuperación completa de lalínea de Tohoku (Tokio-Shin-Aomori), mientras sus técnicos han acabado los análisis de la red entre Omiya y Sanu Shiobara. La líneas del tren bala en Aomori, Iwate, Miyagi y Fukushima se encuentran seriamente dañadas, según explican en la información suministrada por la operadora.
La compañía desconoce el tiempo que puede durar la inspección de las líneas situadas al Norte, Nasu-Shiobara, aunque creen que van a pasar meses hasta poder alcanzar la normalidad.

El tren convencional también se ha visto seriamente afectado en el Noreste de Japón donde los estragos del terremoto de magnitud 8,8 y posterior tsunami fueron más devastadores. Se desconoce aún el balance de daños, pero la red de esta zona del país se da por desaparecida.

El metro en la capital nipona ha vuelto a recuperar la normalidad en la mayor parte de su trazado, aunque el tren-espress que lleva al aeropuerto de Narita sigue sin funcionar.

Los cuatro trenes que se dan por desaparecidos el viernes cuando estaban en servicio entre Iwate y Miyagi fueron localizados con todas las personas a bordo y a salvo. Cerca de 70 pasajeros y maquinistas fueron encontrados a salvo, informó el Ministerio de Transportes japonés y el operador ferroviario JR East, luego de que las dificultades de comunicación complicaran las investigaciones.

(Gráfico Hisagi en Wikimedia Commons. Fotografía de un tren en Higashimatsushima, en la prefectura de Miyagi)

Japón estrena su nuevo tren bala, el Hayabusa

Japón está de estreno. Un nuevo shinkansen se puso ayer en marcha entre las estaciones de Tokio y Aomori (norte de la isla) separadas por 714 kilómetros de distancia que el tren bala salva en tres horas y diez minutos. El Hayabusa (halcón peregrino), al que han vestido con colores llamativos (verdes, rosa y blanco) destaca por su aerodinámica y su escaso ruido a pesar de que alcanza sin dificultad los 300 kilómetros a la hora.

Unas 1.500 personas se agolparon en la enorme estación de la capital nipona para el estreno del Hayabusa, cuyo primer billete se había vendido en subasta por 385.000 yenes (3.350 euros, 4.680 dólares), cuando una butaca de primera clase de un único sentido cuesta 26.360 yenes (230 euros, 320 dólares). Además del Green Car o primera clase de los shinkansen, el Hayabusa incluye el más exclusivo GranClass, un coche con 18 asientos reclinables de cuero -frente a los 80 de turista-, que se asemeja a la clase preferente de las aerolíneas.

Con un morro de quince metros, similar al frontal de un torpedo, el Hayabusa es el más estable, rápido y silencioso de los shinkansen japoneses. El nuevo vehículo es el último producto de la ingeniería japonesa que ha supuesto una década de pruebas e investigaciones que vuelve a colocar a Japón a la cabeza de la tecnología ferroviaria.

Durante la mayor parte del trayecto circula a 300 kilómetros por hora. Gracias a su sistema bascular es capaz de coger pronunciadas curvas a 270 kilómetros a la hora. Un revestimiento especial en cada uno de sus diez coches lo hace además más silencioso, al igual que la aerodinámica de su morro, destinada a amortiguar los ruidos de entrada y salida de los túneles, así como las fuertes ráfagas de viento del norte de Japón.

El Hayabusa es la serie E5 del Shinkansen y desde 2013 está previsto que alcance los 320 kilómetros por hora, un récord en el transporte terrestre en Japón. El nuevo modelo ha abandonado los colores azul y blanco que tradicionalmente han identificado al Shinkansen para teñirse de verde turquesa en la parte superior y blanco en la inferior, con una línea rosada de separación.
Japón vive, sin embargo, pendiente del proyecto de tren de levitación magnética (Maglev), cuyos primeros viajes se esperan para 2030. Con el Maglev, los 550 kilómetros entre las dos grandes ciudades del país, Tokio y Osaka, estarán a solo una hora de distancia en tren.

Desde su inauguración el 1 de octubre de 1964, cuando la alta velocidad era un concepto casi utópico en Europa o Estados Unidos, el shinkansen nunca ha sufrido un accidente mortal y apenas ha sufrido incidentes, a pesar de que Japón es un país proclive a terremotos y tifones.

(Imagen D A J Fossett en Wikimedia Commons)

Schwarzenegger se interesa por el nuevo ‘tren bala’ japonés

Japón siempre ha despertado la admiración de medio mundo. Y digo medio porque el otro aún no ha despertado. La tecnología japonesa maravilló durante décadas, aunque en los últimos años el país del sol naciente parecía haberse relajado. ‘Inventores’ del tren moderno, han sido eclipsados en el último decenio y medio por europeos (Francia con el TGV y Alemania con el ICE) y China (‘maglev’ y CRH-4). Ahora paracen haber recuperadio terreno con sus nuevos ‘trenes bala’, con tecnología punta. Y el medio mundo vyuelve a poner sus ojos en la tecnología japonesa.

Sin ir más lejos, el gobernador de Estado de California (EEUU), Arnold Schwarzenegger, viita durante estos días Japón. Lo primero que ha asegurado en Tokio es que le gustaría disponer de tecnología «futurista» como la del Shinkansen o tren bala japonés para desarrollar la alta velocidad en California. El gobernador republicano se mostró impresionado por las infraestructuras y la tecnología japonesa, tras realizar un viaje de prueba en el Shinkansen de la serie E6, que calificó como un tren «futurista y silencioso», según la agencia local Kyodo.

Schwarzenegger, que se reunió con el primer ministro japonés, Naoto Kan, durante su gira por Asia, dijo que los japoneses tienen una «mente genial» y recordó que no ha habido víctimas en el tren bala nipón en sus casi cinco décadas de historia. «Queremos tener esa clase de tecnología y mentalidad», indicó el ex actor de origen austríaco, que quiere construir una línea de alta velocidad entre San Francisco y Los Ángeles con un gasto estimado en unos 40.000 millones de dólares.

El gobernador de California desde 2003, que ha visitado China y viajará también a Corea del Sur, aprovechó su estancia en Japón hoy para promocionar productos californianos y el turismo. La gira asiática de Schwarzenegger ha recibido muchas críticas a en Estados Unidos por los graves problemas financieros por los que atraviesa California.

El tren más lento de Japón

Veinte kilómetros a hora de velocidad máxima. Apenas si la máquina sobrepasa este velocidad a lo largo de su trayecto de unos noventa minutos de duración. Por eso dicen de él que el tren más lento de Japón, Ferrocarril Kurobe-kyokoku. Un convoy que sube a la garganta de Kurobe, en las montañas de Japón, en la isla de Honshu, de la prefectura de Toyama. Ahí se encuentra una de las presas más grandes del país, cuya construcción terminó en 1963 después de haberse cobrado casi doscientas vidas. Genera electricidad para Kansai Power Eléctrica Company. Durante el verano esta presa descarga 15 toneladas por segundo…En invierno está cerrada.

Cada año más de un millón de turistas acuden a las montañas de Tateyama Kurobe atraídas por las impresionantes vistas y las paredes de hielo que se recorren en los vehículos autorizados. El trayecto del tren recorre precisamente la antigua vía que se trazó para transportar los materiales de construcción necesarios para llevar a cabo la represa en la garganta de Kurobe, dentro en los Alpes japoneses. La ruta serpentea desde la estación de tren de Tateyama, en la Prefectura de Toyama, atraviesa el centro de la parte norte de los Alpes y llega a Omachi, en la Prefectura de Nagano. Pero mantenerlo en funcionamiento es un trabajo arduo y algunos tramos deben ser reconstruidos cada año después del invierno.

Es uno de los pocos trenes existentes en el mundo que cada año tiene que reconstruir su trazado para poder cumplir con su cometido. Los puentes sobre los arroyos de montaña son desmantelados durante el invierno para protegerlos de las avalanchas de nieve. Año tras año, antes de que se inicie la temporada, avanzada la primavera, los equipos de mantenimiento viajan hasta el final de la línea para reconstruir todos los puentes. El servicio turístico se abre en abril y se cierra en noviembre.

Los Alpes japoneses están formados por una cadena de picos volcánicos que van de norte a sur y atraviesan la parte central de Honshu, la más vasta. Son a menudo comparados con los Alpes europeos, debido a su belleza y estructura irregular.

Un tren bala de diseño japonés unirá Hanoi y Ho Chi Minh

El Gobierno de Vietnam invertirá 56.000 millones de dólares en un nuevo tren bala que recorrerá el país de norte a sur uniendo Hanoi con la capital comercial de Ho Chi Minh, informaron fuentes diplomáticas. La línea ferroviaria de alta velocidad tendrá una longitud de 1.560 kilómetros, según Soichi Matsumoto, funcionario de la Embajada nipona en Vietnam.

Matsumoto explicó que gigantes japoneses como Mitsubishi y Kawasaki se presentarán a los concursos oficiales para construir el proyecto.

En la actualidad, el viaje en tren de Hanoi a Ho Chi Minh (antigua Saigón) dura tres días, puesto que los vagones y las vías datan de la época colonial francesa. Pero en cuanto se instale la tecnología nipona Shinkansen, con una velocidad punta superior a 300 kilómetros por hora, el trayecto se reducirá a seis horas sin efectuar paradas.

Japón, que se ha adelantado a las ofertas de China y Corea del Sur, ha exportado su tecnología de tren bala a Brasil y Estados Unidos, entre otros países

Adiós al ‘Shinkasen 500’, relegado a vías secundarias

Triste despedida. Un mito del ferrocarril muere y deja a miles de ‘tecchan’ desamparados y sin el símbolo de la innovación tecnológica de Japón. El ‘tren bala’ más popular queda relegado a otras línea de menor nivel. El primer ‘Shikansen’ que superó los 300 kilómetros por hora se despidió ayer, después de trece años, de las líneas de alta velocidad para dejar paso a sucesores más modernos. Un modelo que se caracterizaba por su larga ‘nariz’ picuda, cercana a los 15 metros de longitud, que hacía que el tren tuviera menos altura de la normal, y que los modelos siguientes cambiaron para hacerlos más cómodos.

Con su línea de corte supersónico y su morro azul y blanco, que recuerda al de un avión de combate, ganó varios premios de diseño industrial y una popularidad que le ha valido una legión de ‘tecchan’ (nombre con el que conoce a los incondicionales de los trenes en Japón). Debido a su elevado precio, sólo se fabricaron nueve trenes, cada uno con dieciséis coches. En su mejor época este modelo realizaba hasta dieciséis viajes al día, pero en los últimos años, con la entrada de los ‘Shikansen’ 700 y N700, se fue retirando poco a poco hasta los dos viajes diarios que hacía últimamente.
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La línea japonesa Hokkaido ultima la puesta a punto de un ferrobús

El Ferrocarril Hokkaido de Japón está probando desde hace dos años unos nuevos autobuses desarrollados por Toyota e Hino Motors, su filial especializada en vehículos comerciales. Pero la peculiaridad de estos autobuses es que se transformen en tren cuando así sea necesario.

El vehículo que aún se encuentra en fase de desarrollo puede circular tanto por asfalto como por raíles. Aunque en realidad, por muy novedosos que parezca, los viejos aficionados al tren saben que en épocas remotas ya hubo varios prototipos similares. Incluso alguno de ellos llegaron a comercializarse. Sin ir más lejos, hace un tiempo conté la historia de un prototipo, a caballo entre autobús y tren de la empresa Evans Auto-Railer que llegó a circular en Estados Unidos en 1937. Más o menos una idea similar, aunque con variantes, a la que propuso Michelin con su vehículo diseñado para circular por la vía aunque dotado de neumáticos de caucho de la firma francesa. Como recordaba en ese post, aún circula con fines turísticos uno de esos ‘trenes’ en Madagascar.

El ferrobus japonés es un vehículos de tamaño pequeño, con una capacidad que no supera los veinticinco viajeros en el mejor de los casos, pero sus ventajas para el operador de ferrocarril son muy notables. La principal de ellas es la flexibilidad del servicio.

Se han diseñado para circular por zonas alejadas, con poco tráfico de viajeros. En lugar de desatender al público en estas zonas poco frecuentadas, y poner un tren al día, el Hokkaido se propone utilizar estos autobuses sobre raíles con una frecuencia mayor. Así, se ofrece un mejor servicio y se evita movilizar un tren.

La compañía ferroviaria estima que, a simple vista, podría parecer ineficiente usar estos autobuses, pero lo cierto es que tienen un consumo de combustible casi ridículo, yaque sólo gastan una cuarta parte de lo que un microbús de esas características consumiría en ciclo mixto, es decir, menos de diez litros a los cien kilómetros.

Para que el microbús pueda montarse en las vías, utiliza unos accesos especiales en algunas de las estaciones de la línea. Una vez alineado con los carriles, dos ejes dignos de una locomotora salen de debajo de su carrocería y separan los neumáticos del suelo, impulsados por actuadores hidráulicos. Así, el DMV (Dual-Mode Vehicle son sus siglas en inglés) ya está apoyado sobre los carriles y puede emprender su marcha.

(Fuente Vía Libre)

El ‘Shinkasen E6’, primer tren bala en rojo y blanco, irá a 320 kilómetros por hora

El próximo modelo del ‘Shinkansen’ o tren bala japonés, el primero con los colores rojo y blanco, alcanzará en 2014 una velocidad máxima de 320 kilómetros por hora, batiendo el récord actual en Japón, dijo hoy a Efe un portavoz de la compañía JR East. El futurista ‘Shinkansen E6’ comenzará a operar en la primavera de 2013 con un largo morro de trece metros, que le permitirá reducir los temblores y alcanzar mayor velocidad, y un techo rojo, en homenaje al color de la tierra del norte de Japón.

Ese año ese tren alcanzará los 300 kilómetros por hora, pero desde 2014 rodará ya a 320 kilómetros por hora, 45 más que la máxima velocidad alcanzada nunca por un medio de transporte terrestre en Japón. Unirá Tokio y Akita, a 662 kilómetros al norte de Japón, aunque desde el año próximo unos 535 kilómetros de esa ruta, hasta la localidad de Morioka, ya serán recorridos por su tren mellizo E5.

La prolongación del morro del nuevo ‘Shinkansen’ va a reducir su número de asientos en el primer y último vagones, por lo que JR East añadirá otro compartimento para que el tren tenga capacidad para sus habituales 350 pasajeros, y habrá que expandir los andenes, explicó el portavoz.

Los colores del nuevo tren bala, que en sus cuatro décadas de historia ha destacado siempre por su estética futurista, son rojo y blanco, a diferencia de los tradicionales azul y blanco con que comenzó, allá por la década de 1940.

Con un diseño supervisado por Kiyoyuki Okuyama, ex de Ferrari -rojos son también los coches de la famosa escudería italiana-, para los asientos se ha elegido amarillo en turista por el paisaje de otoño, mientras para primera clase se ha optado por el azul de una famosa cerámica nipona.

El tren bala japonés supuso toda una revolución para el mundo ferroviario cuando nació hace 45 años. En este tiempo nunca ha sufrido un accidente mortal y su retraso medio ha sido de un minuto. Sin embargo, hace una semana un error humano -los empleados se olvidaron de colocar cuatro tornillos- obligó a la insólita suspensión de tres horas en su servicio entre Osaka y Tokio, que diariamente transporta a 400.000 personas.