Archivo diario: septiembre 10, 2013

Metro Madrid sanciona a una usuaria por utilizar la bici en los pasillos del suburbano fuera de horario

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Sin ninguna contemplación, fieles al espíritu de la ley. Metro Madrid ha multado a una usuaria que desplegó su bicicleta en uno de los vestíbulos de la estación Méndez Alvaro de la capital madrileña. La viajera asegura que los vigilantes estaban ‘a la caza’ desde hace días, mientras la empresa explica que se trata de una reincidente y que se salta la normativa, clara y determinante, cuando ella quiere. La pasajera, usuaria habitual del metropolitano, ha pedido la intervención del Consorcio Regional de Transportes.

Los pasajeros no pueden circular con sus bicis en el interior del suburbano cuando quieran. Hay restricciones horarias: sábados, domingos y festivos están permitidas durante todo el día; mientras que de lunes a viernes, sólo se puede transitar con ellas por pasillos o coches en horarios valle; es decir de 10.00 a 12.30 horas y de 21.00 hasta el cierre de servicio. El reglamento de Metro Madrid especifica que las bicicletas «que vayan plegadas (así como las bicicletas infantiles), tendrán la consideración de bultos de mano», por lo que pueden ser transportados «siempre que no supongan molestias o peligro para otros viajeros».

El conflicto no es nuevo. Aunque en esta ocasión tiene cara, además de nombre y apellidos. Ana Jiménez, una usuaria habitual del suburbano, fue denunciada el 3 de septiembre cuando transitaba por los pasillos de la estación Méndez Álvaro con su bici plegable. Pasó los tornos con el cierre de seguridad, pero una vez los hubo traspasado, reconoce que la desplegó para hacer más cómodo su transporte por las escaleras y pasillos. “Fui acorralada por dos empleados del metro y dos trabajadores de seguridad; llevaban dos semanas siguiéndome a la espera de cazarme en un descuido». La tomaron los datos y le abrieron un expediente por infringir la normativa de Metro. Pero, según su relato, el incidente no quedó ahí: «Me echaron entre insultos y amenazas. Uno de los trabajadores me dijo que, ni con bici ni sin ella, nunca iba a volver a pisar el metro», explica la usuaria en la reclamación presentada ante el Consorcio Regional de Transportes, el organismo encargado de tramitar su denuncia.

La empresa, por su parte, defiende la actuación de sus empleados en este caso. Un portavoz asegura que la usuaria «pasó los tornos con la bici plegada. Pero al llegar a las escaleras la desplegó, algo que está prohibido; no se puede ir con una bicicleta abierta por el interior de las instalaciones fuera del horario establecido». Los responsables de la estación afirman que «no es la primera vez que le llaman la atención a esta persona y siempre ha vuelto a reincidir». El objetivo principal con estas normas es no molestar a los demás usuarios, es sentido común, explican desde Metro.

Ana Jiménez se enfrenta ahora a una sanción de 30,05 euros, porque está acusada de una infracción leve. Es la multa mínima; aunque se puede quedar en un apercibimiento, sin que llegue a prosperar la sanción. “Lo principal en este caso es que se conozca el reglamento. De ningún modo se quiere castigar el uso de la bici», explican desde el Consorcio, que estudiará el caso de Ana Jiménez para decidir si finalmente prospera la sanción. Ana cree que el metro «debería ser menos restrictivo con las bicis y no llevar la normativa hasta el extremo». En su opinión, «la actitud de los empleados de Metro demuestra que la bici todavía no está aceptada como un medio de transporte en esta ciudad». Metro asegura, sin embargo, que la normativa es «razonable y útil para que todos los usuarios puedan convivir sin conflictos«.

(Fuente 20 Minutos. Imagen Jorge Paris)