Archivo diario: marzo 5, 2021

Sin acuerdo en el conflicto del tranvía de Zaragoza

La reunión en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (Sama) entre los trabajadores y la empresa del tranvía de Zaragoza ha finalizado de nuevo sin acuerdo, por lo que se mantendrán los paros parciales de media hora en las horas punta. Desde Tranvías de Zaragoza aseguran que el comité de empresa quiere seguir dilatando la negociación y convertir este proceso en «interminable», después de más de dos meses fallidos de reuniones en el Sama y dos años de conversaciones previas sobre el convenio.

Tras llevar más de dos años con el sueldo congelado y tener una de las peores remuneraciones del sector, los trabajadores del Tranvía de Zaragoza se han plantado. Y por mayoría valoraron de manera totalmente unánime continuar con los paros. «Se sienten infravalorados», dijo el presidente del comité de Tranvía de Zaragoza, quien recordó que han denunciado ante el juzgado el Erte que la empresa aplicó el año pasado con el consiguiente descuento en las nóminas.

La compañía acusa al comité de haber «tirado por la borda» los avances de los últimos meses, en una estrategia «orquestada» de manera conjunta con los trabajadores del transporte urbano tomando «como rehenes» a los ciudadanos como modo de presionar y de conseguir unas reivindicaciones «totalmente alejadas de cualquier realidad». Defienden que han realizado un ejercicio de responsabilidad, especialmente en el actual contexto económico y social y que han atendido, en la medida de sus posibilidades, las reclamaciones del comité sin asumir pretensiones «fuera de la realidad».

Los Tranvías de Zaragoza recalca el esfuerzo llevado a cabo al proponer un marco estable para los próximos años basado en cuatro ejes: mantenimiento del empleo, mejora del poder adquisitivo, mejoras en la jornada, la formación y la promoción interna y mejoras organizativas y del cuadrante laboral. Los paros se iniciaron el pasado 5 de enero, han continuado en febrero y van a mantenerlos desde el 9 de marzo hasta el 9 de abril. Hay condiciones, explican fuentes del organiosmo, a las que no piensan renunciar como el establecimiento de una jornada máxima de conducción ininterrumpida de 4 horas y media frente las 5 horas y media que vienen realizando los conductores, así como fijar su jornada en 7 u 8 horas diarias y no las 9 que están haciendo habitualmente.

Los trabajadores quieren evitar «turnos maratonianos» que hacen imposible la conciliación de la vida laboral y personal, reducir la jornada (ya que el proyecto de explotación marca 1.688 horas anuales de trabajo y hacemos 1.720) e incrementar los salarios «muy por debajo de los que tienen otros profesionales del sector». «Habíamos rebajado nuestras pretensiones. Les ofrecimos en el Sama el IPC más el 1,5% en lugar del 4% de nuestra propuesta inicial, pero la empresa a todo nos dijo que no». «La concesionaria nos ofreció darnos el IPC de estos años y crearnos una paga de nuestro IPC. Nos parece totalmente insuficiente», reiteran las mismas fuentes.

La compañía, mantiene su voluntad de alcanzar acuerdos y sigue tendiendo la mano para que en un gesto de responsabilidad y altura de miras el comité ponga en valor la propuesta planteada por la empresa tras más de dos años de negociaciones y las 50 reuniones mantenidas» dado que en ese tiempo «por la falta de acuerdo no se ha podido materializar la mejora que propone la empresa para los trabajadores». De cualquier forma, señalan «los paros realizados, con unos servicios mínimos del 80% o 90% se están desarrollando sin incidencias y sin afecciones de relevancia para los usuarios dado el escaso seguimiento inferior al 25% del global de la plantilla e inferior al 50% en el colectivo de conductores».