Archivo diario: marzo 1, 2019

El ‘arte’ del grafiti le sale caro a Renfe

Renfe lleva a la Feria Arco 2019, que se celebra en Madrid hasta el 3 de marzo, la problemática del vandalismo y los grafitis en los trenes. Bajo el lema “Esta obra ha costado 15 millones de euros y la hemos pagado entre todos”, Renfe dispone de un espacio en Arco para la visualización de los daños y la sensibilización social. “Queremos transmitir un mensaje y un ejercicio de concienciación social y ciudadana de lo que representan los grafitis en los trenes”, aseguraba el presidente, Isaías Táboas, que el jueves presentaba en este espacio escénico la puerta grafiteada de un tren.

Con esta iniciativa, la compañía se suma por vez primera a esta importante cita artística y lo hace para trasladar la relevancia social y económica de una actividad delictiva que pone en riesgo la seguridad de los viajeros y que supone cada año un importante coste económico. El gasto anual que asume Renfe, 15 millones de euros, se derivan de la limpieza de trenes, pinturas, agua, disolventes, traslados a talleres o movilización de personal, entre otros conceptos.

A estos costes hay que sumar los gastos anuales en medios destinados en vigilancia y seguridad, que supondrían otros 10 millones de euros adicionales. Un coste total de 25 millones anuales que acaban pagando todos los ciudadanos con sus impuestos. Desde 2008 los grafitis casi se han duplicado. Además del incremento de estos actos se ha detectado que los grafiteros cada vez emplean más violencia y que en muchos casos se trata de grupos organizados. El riesgo es tanto para los propios viajeros como para el personal de Renfe y vigilantes. Incluso los grafiteros ponen en peligro su integridad física cuando atacan un tren en servicio, al saltar a las vías por las que pueden circular otros trenes.

De hecho, el método de accionar indebidamente el aparato de alarma de los convoys cuando están en servicio, lo que produce la detención de emergencia del tren, es uno de los utilizados por las bandas de grafiteros.

Cuando las pintadas se producen en trenes en servicio causan molestias y retrasos. Sólo en Cercanías Madrid las demoras afectaron el año pasado a más de 200.000 viajeros por grafitis en trenes en marcha. Además, un tren grafiteado debe ser limpiado inmediatamente, por lo que se tiene que retirar del servicio, con el consecuente trastorno para la programación de trenes y causando incidencias.

Renfe colabora con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y denuncia todos los actos ante la autoridad competente (Policía Nacional, autonómicas, locales o Guardia Civil). La empresa considera que es esencial la concienciación e implicación de instituciones y ciudadanos para luchar y denunciar estas acciones. La campaa de Arco La campaña tiene continuación en internet y redes sociales a través de www.laobramascara.com y #LaObraMasCara.