Renfe Mercancías va a transportar un total de 15.000 toneladas de carril destinado a la línea de alta velocidad Madrid-Extremadura. El transporte, que tiene origen en Valladolid y en la localidad leonesa de Villada, se realizará en dos fases entre el presente mes de junio y finales de septiembre. La operación consiste en la realización de 30 trenes cuya carga equivale a 62 futuros kilómetros de vía doble entre Cáceres y Plasencia.
En la primera fase, que se prolongará hasta el 16 de julio, van a circular dos trenes por semana con origen en la factoría de Redalsa en Valladolid. Cada uno de los trenes circulará cargado con 30 barras de carril de 270 metros de longitud. La fabricación de este carril, barras de 90 metros, se realiza en la planta de Arcelor de Veriña, en Asturias. Las barras originales se sueldan entre sí hasta alcanzar la longitud de 270 metros con el objetivo de optimizar el transporte.
La segunda fase se iniciará el 17 de julio y se desarrollará hasta completar la operación. En esta fase el carril que se va a transportar es de 108 metros y se encuentra acopiado en la base de Adif situada en la localidad leonesa de Villada.
El transporte de carril es una operación que Renfe Mercancías realiza habitualmente para suministrar material a las líneas que Adif está construyendo o a aquellas en las que se realiza mantenimiento.
El carril que fabrica Arcelor en Veriña es muy apreciado, como ponen de manifiesto los contratos de suministro realizados durante los últimos años para Alemania, Italia y Australia. Deutshe Bahn, el administrador de infraestructuras ferroviarias del gobierno germano, renovó en 2016 su contrato con Arcelor-Mittal hasta 2018, lo que supuso para el gigante siderúrgico un pedido de 147.000 toneladas de carril, cuya producción repartió entre sus plantas de Polonia y la de Gijón.
La multinacional también suscribió en 2106 un contrato con Rete Ferroviaria Italiana (RFI), la empresa encargada del mantenimiento de la infraestructura ferroviaria de ese país, a la que tenía previsto suministrar 32.000 toneladas de carril en el plazo de dos años, repartiéndose la producción con las plantas de Arcelor en Polonia y Luxemburgo.
Con las reformas llevadas a cabo, las instalaciones de Veriña tienen capacidad para fabricar raíles de hasta 108 metros de longitud frente al anterior tope de 90 metros. La factoría asturiana ha instrumentalizado más de 15 tipos de carril que luego se han aplicado tanto en la planta de Gijón como en las otras cuatro de tren de carril que tiene ArcelorMittal repartidas por Europa y Estados Unidos.